sábado, 15 de febrero de 2025

Ferdia Lennon: Deus Ex

Idioma original: inglés

Título original: Glorious Exploits

Año de publicación: 2024

Traducción: Jon Bilbao

Valoración: recomendable

Año 412 A. C. Tras la derrota ateniense en su intento de conquistar Siracusa, en Sicilia, los siracusanos encierran a los soldados prisioneros en unas canteras e ir a visitar a aquellos atenienses muertos de hambre se convierte en un pasatiempo para los alfareros en paro Lampo y Gelón, más aún cuanto que éste último es un fan absoluto de la tragedia griega y trata de que los atenienses le reciten pasajes de las obras de Eurípides -su favorito y el señor de color carmín y ojos saltones que nos mira desde la cubierta del libro-, a cambio de algo de comida. Pero, no contento con esas migajas, un día decide montar con los prisioneros, allí en la cantera, una representación de Medea, nada menos, a la que luego se sumará Las Troyanas (de ahí los desorbitados ojos del señor de color carmín, supongo).

Aunque Gelón es el más motivado para llevar a cabo esta incierta aventura escénica, la historia nos la cuenta Lampo, un tipo más extrovertido y menos leído -de hecho, no sabe leer ni escribir -que ve en esta locura una manera de tener entretenido a su amigo, comprensiblemente deprimido desde la muerte de su hijo y el abandono de su esposa; él, por su parte, lo considera una manera de matar el tiempo entre visita y visita a la taberna, donde trabaja Lira, una esclava de la que se ha enamorado y también, por qué no, una fuente de ingresos cuando encuentran a un "productor", un extraño personaje de allende los mares llamado Tuireann. En todo caso, la obra tira para adelante por el tesón y la astucia de ambos directores de escena, la ayuda de unos chiquillos que juegan por los campos y gracias, sobre todo, a que entre los atenienses, pese a estar hambrientos, enfermos y hechos polvo, en general, encuentran algunos actores más o menos resultones que, convenientemente maqueados, puede que den el pego... o tal vez no.

Con un tono tragicómico -más cómico que trágico, gracias, sobre todo, al extrovertido y entrañable Lampo, aunque la tragedia, también está presente, pues la historia se desarrolla en tiempos de guerra- va avanzando esta novela, de forma bastante resultona; tampoco es de extrañar, pues las historias que cuentan cómo se monta una obra de teatro, casi un género en sí mismas (con el subgénero de las que están interpretadas por presos o prisioneros de guerra... A bote pronto, recuerdo, en novela, La semilla de la bruja de Margaret Atwood y en cine películas como la francesa El triunfo o Las vidas de Sing Sing, esta última estrenada recientemente), suelen resultar de lo más entretenidas y, por lo general, consiguen que el lector o espectador/a empatice con los esforzados personajes que tratan de representar la obra sorteando dificultades y contratiempos. Lo mismo ocurre aquí, claro, con el añadido de que la trama se desarrolla en la Magna Grecia de hace casi 2500 años y la ambientación, por tanto, supone también un requisito importante. Que parece, en todo caso, bastante bien lograda, aunque tengo la sospecha de que a los lectores de novela histórica más rigurosos quizás no les agrade el tono desenfadado y contemporáneo de los diálogos. Para el común del público lector, no obstante, representa un añadido que refuerza la comicidad de la novela, debido al contraste con la antigüedad del contexto.

Deus Ex -el título en inglés resulta más gracioso, pero, por una vez su traducción, aunque sea al latín (debería ser al griego), tiene cierto sentido- supone, en todo caso, un estupendo debut literario para su autor, el irlandés Ferdia Lennon. Esperemos que pronto nos ofrezca una nueva novela, al menos tan divertida como ésta.

1 comentario:

Félix dijo...

Me ha sorprendido para bien la novela. Se nota que el autor maneja varios recursos, porque hablar como si fuera el presente (que los de Siracusa digan casting es cuanto menos insólito) y que no desentone es un mérito. Al principio pensé que quedaría en la anécdota (sobre todo porque el narrador es como un Percy Jackson pasado de rosca), pero logra cotas de emotividad.
PD: el vago que oficia de productor es Tuireann, no Tuileann.
PD2: Juan, me sorprendió que una novela que se presta a lo cómico la hayas reseñado de forma más seria, jaja.