Idioma original: Inglés
Título original: Evening in paradise: More stories
Año de
publicación: 2018
Traducción: Eugenia Vázquez Nacarino
Valoración: Muy recomendable
-Hola Oriol. Me comentas que te han regalado Una noche en el paraíso. ¿Qué te parece una reseña a cuatro manos? Desde luego, es un
libro al que le tengo un montón de ganas. La anterior recopilación de
relatos de Lucia Berlin, Manual para mujeres de la limpieza, me
fascinó; me pareció que la autora tiene una voz original. Exquisita y cargada de arrojo y belleza.
Y además, su condición de personaje relegado al olvido, ninguneado por la
industria editorial, le añadía un extra de atractivo, aunque esta es una
consideración que nada tenga que ver con el interés o valor de su escritura.
Pero bueno, lo que vengo a decirte es que no suele ocurrirme con frecuencia,
esperar la salida de un título nuevo con tanta apetencia como con Una noche
en el paraíso. Si me gusta tan sólo la mitad de lo que lo hizo Manual para mujeres de la limpieza ya será un gustazo.
-¡Encantado de hacer una reseña contigo, Carlos! La verdad es que yo no
he podido leer todavía Manual para mujeres de la limpieza, pero no
tardaré en hincarle el diente. Y es que Una noche en el paraíso me ha
dejado con ganas de más Lucia Berlin. Por si no se ha notado, esta antología me
ha encantado: la mayoría de los relatos que la componen estaban muy bien. Encima, es lo suficientemente variada como para no saturar al lector. De hecho,
Berlin me ha parecido capaz de moverse con holgura por registros de lo más
distintos. Algunas historias estaban en primera persona, otras en tercera;
había textos empañados por un tono algo ingenuo, y otros se decantaban por una
voz narradora casi fatalista; cuando te has acostumbrado a los escenarios suburbanos, va y te sale con una ambientación que bien podría haber salido de la pluma de Stefan Zweig...
-Quizás, Oriol, uno de los rasgos de Lucia Berlin que más me llaman la
atención sea la ausencia de cinismo, carencia más que remarcable en alguien que
a los treinta y dos años acumulaba tres ex-maridos, cuatro hijos y una rotunda
afición al trago. Lucia Berlin (EE.UU., 1936/2004) escribió a lo largo de su
vida unos setenta y pico cuentos, veintidós de los cuales están recogidos en Una noche en el paraíso, habiendo
asistido en su juventud gracias a su conocimiento del castellano a las clases
del escritor aragonés Ramón J. Sender en la Universidad de Nuevo México. Y sí, sus protagonistas parecen tener mucho de
ella misma; mujeres que siempre contestan al teléfono y nunca cierran con llave.
Mujeres que plantan flores, cultivan carcajadas, sonríen a las visitas inesperadas
y leen y cantan a sus hijos, aunque sus vidas parezcan una calamidad, un
despropósito, un loco desafío.
-Yo también he localizado en estas narraciones los elementos autobiográficos de los que hablas, Carlos. Uno de los más curiosos aparece en "La barca de la Ilusión" y "Las (ex)mujeres". Ya sabes, cuando dos mujeres apuñalaran al ex-camello de su marido, aunque el herido apenas sangra. Y estoy completamente de acuerdo en que la voz de Berlin, por fatalista que sea, nunca es cínica. Hay relatos en los que habla de las infidelidades o de los prejuicios, por ejemplo, y la tía es capaz de meter humor. Entendámonos: un humor simpático, nunca cáustico. El humor empañaba precisamente "Mi vida es un libro abierto", uno de mis relatos favoritos. Llegados a este punto, ¿puedo preguntarte si hay algún texto que no te haya gustado y por qué?
-Claro que hay relatos que me han gustado y otros que no tanto. En general me han parecido un punto más apesadumbrados y abigarrados que los cuentos recopilados en Manual para mujeres de la limpieza. Me ha llamado al atención la presencia de numerosos personajes en algunas piezas, algunas tan breves, como si la autora quisiera -intencionadamente o no- dejar constancia de la presencia de determinadas personas. Pero si tuviese que destacar alguno, me quedaría con "Perdida en el Louvre" y también con "Lead street, Alburquerque". Por perlas como esta: "Tendríamos dos hijas y una sería dentista y la otra adicta a la cocaína. Bueno, por supuesto, no sabía nada de eso, pero vi que no sería un camino de rosas". O esta otra: "No se trataba solo de que fuese joven. Llevaba toda la vida de un lado a otro. (...) daba la impresión de que nadie le hubiese contado ni enseñado en qué consistía hacerse mayor, formar una familia o ser una esposa. De que una razón de que fuese tan callada era que estaba observando, para ver cómo se hacía". Pero si me preguntas por alguno que no me haya gustado, pues me temo que la respuesta se queda en blanco, porque de verdad que no me parece ninguno prescindible. ¿Qué opinas tú, Oriol?
-Uff... En mi caso, ha habido unos cuatro relatos que no me han gustado. Cosa que no ha arruinado mi experiencia lectora, ¿eh? Pero, por ejemplo, el que da título al volumen me ha dejado bastante tibio. Lo mismo sucedía con "Polvo al polvo". Y justo estas dos historias giraban de forma casi exclusiva alrededor de los hombres. Teniendo en cuenta que gran parte del libro se centraba en la figura femenina, lo cierto es que me hubiera gustado poder disfrutar estas dos piezas.
-Yo también he localizado en estas narraciones los elementos autobiográficos de los que hablas, Carlos. Uno de los más curiosos aparece en "La barca de la Ilusión" y "Las (ex)mujeres". Ya sabes, cuando dos mujeres apuñalaran al ex-camello de su marido, aunque el herido apenas sangra. Y estoy completamente de acuerdo en que la voz de Berlin, por fatalista que sea, nunca es cínica. Hay relatos en los que habla de las infidelidades o de los prejuicios, por ejemplo, y la tía es capaz de meter humor. Entendámonos: un humor simpático, nunca cáustico. El humor empañaba precisamente "Mi vida es un libro abierto", uno de mis relatos favoritos. Llegados a este punto, ¿puedo preguntarte si hay algún texto que no te haya gustado y por qué?
-Claro que hay relatos que me han gustado y otros que no tanto. En general me han parecido un punto más apesadumbrados y abigarrados que los cuentos recopilados en Manual para mujeres de la limpieza. Me ha llamado al atención la presencia de numerosos personajes en algunas piezas, algunas tan breves, como si la autora quisiera -intencionadamente o no- dejar constancia de la presencia de determinadas personas. Pero si tuviese que destacar alguno, me quedaría con "Perdida en el Louvre" y también con "Lead street, Alburquerque". Por perlas como esta: "Tendríamos dos hijas y una sería dentista y la otra adicta a la cocaína. Bueno, por supuesto, no sabía nada de eso, pero vi que no sería un camino de rosas". O esta otra: "No se trataba solo de que fuese joven. Llevaba toda la vida de un lado a otro. (...) daba la impresión de que nadie le hubiese contado ni enseñado en qué consistía hacerse mayor, formar una familia o ser una esposa. De que una razón de que fuese tan callada era que estaba observando, para ver cómo se hacía". Pero si me preguntas por alguno que no me haya gustado, pues me temo que la respuesta se queda en blanco, porque de verdad que no me parece ninguno prescindible. ¿Qué opinas tú, Oriol?
-Uff... En mi caso, ha habido unos cuatro relatos que no me han gustado. Cosa que no ha arruinado mi experiencia lectora, ¿eh? Pero, por ejemplo, el que da título al volumen me ha dejado bastante tibio. Lo mismo sucedía con "Polvo al polvo". Y justo estas dos historias giraban de forma casi exclusiva alrededor de los hombres. Teniendo en cuenta que gran parte del libro se centraba en la figura femenina, lo cierto es que me hubiera gustado poder disfrutar estas dos piezas.
-Los cuentos aquí reunidos fueron escritos entre 1981 y 1999, publicados sobre todo en revistas y editados en formato libro con posterioridad, sin apenas repercusión entre lectores y crítica. Y ahora, décadas después, se han convertido en un éxito de ventas y han tenido una repercusión extraordinaria. No soy capaz de elaborar una teoría al respecto, pero me alegro porque me parece una escritura valiosa y perdón por la falta de originalidad, lúcida y luminosa. Así que en mi opinión, resultan muy recomendables. ¿Qué opinas tú, Oriol?
-¿Cómo? Ah, perdona, ya estaba buscando Manual para mujeres de la limpieza. Coincido completamente contigo, Carlos. Muy, muy recomendables.
Oriol Vigil & Carlos Ciprés
También de Lucia Berlin en ULAD: Manual para mujeres de la limpieza
6 comentarios:
Manual para mujeres de la limpieza es un grandísimo libro. Me dejó tan impresionado que busqué información sobre Lucia Berlin: encontré entrevistas que le realizaron y el recuerdo que me ha quedado es el de una mujer muy muy valiente.
Saludos
Hola Gabriel, coincido por entero en que la escritura de Lucia Berlín desprende la sensación de que se trata de una persona que, más que hablar de libertad, la usó en su día a día. Un saludo.
Lucia Berlín tomó clases de escritura con ramón j sender
Por fin me he decidido con Lu(s)ía Berlin. Fascinantes relatos. El que da título al libro es maravilloso. Día de lluvia,de una sola página, es perfecto. O qué decir de Perdida en el Louvre o de Un día brumoso? He de confesar que tenía mis reticencias pero Berlin me ha ganado y tengo que agradecérselo a Pedro Almodóvar, que me ha dado el último empujón...Saludos
https://www.eldiario.es/cultura/lucia-berlin-peculiar-chica-almodovar_1_1129693.html
"Las (ex) mujeres" parece escrito por Almodóvar, desde luego. O "Navidad.Texas.1956". "Un día en el paraíso" es un material estupendo para preparar un buen guión aunque este le pega menos al manchego. Qué maravilla, Berlin!!
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