domingo, 7 de febrero de 2010

Colaboración: Wicked. Memorias de una Bruja Mala, de Gregory Maguire

Idioma original: inglés
Título original: Wicked, the Life and Times of the Wicked Witch of the West
Fecha de publicación: 1995
Valoración: si te gusta la novela fantástica, no te lo pierdas

Si te hablan de la tierra de Oz, probablemente pienses en baldosas amarillas y hombres de hojalata sin corazón, en zapatos rojos y en brujas malvadas. Bueno… pensarás en ello si no has leído Wicked, porque al hacerlo te das cuenta de que la historia cambia (y cómo) dependiendo de quien la cuente.

En Wicked visitamos una historia que a todos nos suena, un universo que nos es familiar, pero que ha cambiado considerablemente. Wicked es la historia de Elphaba, una niña que nace con la piel verde y dientes de tiburón, una niña que forjará su personalidad gracias a sus diferencias y luchará por lo que cree por encima de todo, aunque eso haga que con el tiempo sea conocida como la “Malvada Bruja del Oeste”.

A pesar de ser una obra novel, hablamos de un libro complejo y trabajado, que aprovecha el entorno fantástico de Oz para convertirse en toda una declaración de intenciones. Nos encontramos con un universo donde los Animales, con capacidad de hablar, luchan por ser respetados y reconocidos como ciudadanos pensantes y con alma, como parte latente e importante de Oz. Una lucha que crece y adquiere dimensiones que obligarán a nuestra verde protagonista a tomar partido y a poner en tela de juicio los principios que tratan de inculcarle, a cuestionarse qué es bueno y qué malo en una sociedad que mueven unos pocos.

Pero, como dice Gregory Maguire, “no es cosa fácil ser la mala del cuento”.

“Y la piel, sí, en efecto, la piel era verde como el pecado.
No era un color feo, pensó Nana; solo que no era un color humano.”


Esta precuela de la historia de Dorita, ha vendido más de un millón de ejemplares y ha generado uno de los musicales que más éxito ha cosechado en los últimos años, tanto en Londres como en Broadway, si bien en escena se toman la licencia de cambiar el final, previa autorización del autor, que debe estar bastante contento, puesto que ha dedicado su segunda parte (“Hijo de Bruja”) al casting original del mismo.

Personalmente, habiendo leído el libro y visto el musical, recomiendo fervientemente el primero, y unos oídos abiertos a la calidad sonora del segundo, pero recordando que en este último la fábula política y reivindicativa creada por Maguire se queda solo en fábula, estupenda igualmente, pero sin la mordiente que la distingue de otras historias fantásticas sin más.

Firma invitada: Patricia Sánchez

sábado, 6 de febrero de 2010

Jonathan Safran Foer: Tan fuerte, tan cerca

Idioma original: inglés
Título original: Extremely Loud & Incredibly Close
Fecha de publicación: 2005
Valoración: Recomendable

Oskar Schell es un niño de 9 años que vive en Nueva York. Pero no es un niño normal; es inventor, escritor de cartas, diseñador de joyas... y, últimamente, también ejerce de detective, pues ha encontrado una llave que perteneció a su padre (muerto hace un par de años en el atentado contra las Torres Gemelas) y se ha propuesto encontrar la cerradura a la que pertenece. Aunque es algo prácticamente imposible (especialmente, si tenemos en cuenta que sólo en Nueva York hay más de 162 millones de ellas), Oskar tiene un dato que puede serle de ayuda: el sobre que contenía la llave, en el que está escrita la palabra Black.

Así comienza la historia principal de Tan fuerte, tan cerca, que sirve de hilo conductor para otras historias no menos importantes, como la de sus abuelos, alemanes, que llegaron a EE.UU. huyendo de la Segunda Guerra Mundial y cuya vida en común ha estado tan marcada por el silencio y los recuerdos que no les ha dejado ser felices nunca.

Un dato destacable (para bien o para mal) de esta novela es que es muy, muy experimental. En ella nos encontramos fotografías, páginas en blanco, páginas que sólo contienen una frase o una palabra, textos tachados, emborronados, hileras de números... así como varios narradores diferentes que continuamente nos llevan adelante y atrás en el tiempo. Hay quien ha acusado al autor de ser un artista de los fuegos artificiales y de haber escrito una novela normalita al amparo de unos innecesarios pero resultones juegos de estilo, pero no comparto esa opinión. Puede que no estemos ante un libro que vaya a cambiarnos la vida, pero creo que el trabajo de Foer es sobresaliente y muy original, y considero que todos los juegos narrativos que nos ofrece enriquecen y completan la(s) historia(s) que narra.

No os voy a engañar: con este libro no habrá término medio. Os gustará mucho o lo considerareis una porquería, pero, en cualquier caso, merece la pena leerlo. Y eso no es algo que se pueda decir de cualquier libro.

viernes, 5 de febrero de 2010

James Joyce: Dublineses

Idioma original: inglés
Título original: Dubliners
Fecha de publicación: 1914
Valoración: imprescindible

Para 1905 Joyce ya tenía planeado escribir una serie de historias cortas independientes que se unirían en Dublineses para formar una obra redonda y compacta. Esta peculiar y memorable novela no se publicó hasta 1914, tras algunas pequeñas concesiones editoriales. Sin embargo, James Joyce siempre se negó en redondo a omitir historias o a cambiar el orden de las mismas.

Y es que nada en Dublineses es aleatorio. Cada una de las quince historias que la conforman aporta su particular pincelada al retrato colectivo implícito en el título: las tres primeras nos hablan de la infancia; las cuatro siguientes, de la adolescencia; las siguientes, de la madurez; las últimas, de la vida pública. Así, asistimos al desarrollo -¿o tal vez degeneración?- de este protagonista múltiple que se nutre de cada protagonista particular y que crece no sólo en cuanto a temática sino en cuanto a forma. Ejemplo: las historias protagonizadas por niños están narradas en primera persona, pero en cuanto pasamos a la adolescencia encontramos diferentes juegos de focalización narrativa en tercera persona.

A pesar de no ser una novela al uso, Dublineses tiene definitivamente la consistencia y complejidad suficientes para no ser considerada como una mera recopilación de relatos: es lo que algunos críticos han convenido en llamar "composite novel" (algo así como "novela compuesta" en español).

Las historias, aunque son totalmente autónomas, adquieren un sentido más profundo al ser leídas en su conjunto, y están perfectamente interrelacionadas mediante la combinación de ciertos factores recurrentes: la ciudad de Dublín y el efecto opresor que ésta tiene en sus habitantes, el peso de la religión, el nacionalismo irlandés, el omnipresente alcohol...

Y también algunos menos obvios, como la anteriormente mencionada especial organización de las historias (no sólo nos movemos desde la infancia hasta la adultez, sino desde el verano hasta el invierno), el uso recurrente de la violencia y, más sutilmente, la atmósfera gris, irrespirable y "paralizante" de todas las historias. La ciudad retratada es un símbolo de la gloria ansiada e inalcanzada, e imposible de alcanzar si sus habitantes no cambian. El problema es que todos los protagonistas se encuentran, precisamente, "paralizados".

Dublineses es una obra rica, original, completa y, sobre todo, compleja. En definitiva, imprescindible. Por eso, quien se anime a abordarla deberá armarse de una buena edición anotada: cada frase adquiere significados inusitados dependiendo del ángulo desde el que se lea.


Otros libros de James Joyce  reseñados en Un Libro Al Día: ExiliadosUlisesFinnegans Wake

jueves, 4 de febrero de 2010

Helene Hanff: 84, Charing Cross Road

Idioma original: inglés
Título original: 84, Charing Cross Road
Fecha de publicación: 1970
Valoración: muy recomendable

JAIME: Ya he terminado el libro que me dejaste, Santi, ¡y está muy bien! Me esperaba algo peor, la verdad, porque te noté un poco escéptico...

SANTI: Sí, bueno, a mí me pareció una curiosidad, sin más. Una rareza sin mucha chicha, vamos. Por cierto, ¿hemos confirmado ya que está "basada en hechos reales" y que no es una fabulación de la autora?

JAIME: Vaya, pues yo ni me lo había planteado. Todo el libro se presenta como una colección de cartas entre Helene Hanff y una librería de viejo a lo largo de 20 años. Cada carta tiene su encabezado con la dirección (Nueva York y Londres, respectivamente), la fecha, los saludos y también termina como Dios manda. Es curioso, pero si la autora hubiera escrito una narración más ortodoxa contando su relación con esa librería hubiera dudado inmediatamente de su veracidad, pero al elegir este formato la creí desde el principio a pie juntillas. Está claro que soy un lector mucho más crédulo que tú...

SANTI: Ah, compañero, es que yo me leí Memorias de una geisha pensando que eran unas memorias reales, y no descubrí que era una novela hasta el final. ¡No te imaginas qué decepción! Desde entonces no me fío de nadie ni de nada. En todo caso, sea una novela o una colección real de cartas, la oposición entre el estilo espontáneo y extrovertido de la americana, y la corrección elegante de los británicos está muy bien, ¿verdad?

JAIME: Sí, eso es genial, ¡es lo que le da toda la gracia al libro! De hecho, ella maltrata bastante a los pobres libreros, llamándoles de todo, y ellos siempre contestan del modo más polite, pidiéndole mil perdones y contándole lo contentos que están con la coronación de la reina. Eso me ha resultado muy curioso: cómo va cambiando el trasfondo histórico, casi sin que el lector se dé cuenta... Yo le pondría un "muy recomendable". ¿Qué te parece?

SANTI: Bueeeeeno, vaaaaale. A mí me gustó menos que a ti, me parece, pero acepto "Muy recomendable" como animal de compañía.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Philippe Claudel: El informe Brodeck

Idioma original: francés
Título original: Le Rapport de Brodeck
Año de publicación: 2007
Valoración: Está bien

La vida de un pequeño pueblo de provincias se ve agitada con la llegada del Anderer, el otro, el extranjero. Un personaje peculiar, histriónico, teatrero y silencioso. Nadie lo conoce, nadie sabe nada de él. Se aloja en la pensión del pueblo, sale a diario, pasea, se relaciona con los vecinos y pregunta, rastrea. Los habitantes del pueblo, tras la sorpresa y la curiosidad, muy pronto comienzan a desarrollar una especie de miedo que deriva lentamente en odio, un odio irracional, profundo, nacido de las heridas aún sin cicatrizar que dejó la guerra.

En medio de esta situación está Brodeck, un hombre discreto, que arrastra su pasado en la mirada. Vive con su madre adoptiva, su mujer y su hija, en ese pueblo que muy pronto muestra su más absoluto rechazo hacia el extranjero hasta el punto de que, un buen día, los hombres del pueblo se reúnen y lo asesinan. Brodeck no ha participado en el asesinato pero, casualidades de la vida, lo descubre y es además el único hombre del pueblo con estudios. Entonces, el pueblo le transmite un peso que poco a poco lo irá desmoronando e irá mostrándonos las heridas de su propio pasado. Brodeck tiene que escribir un informe en el que relate por qué el pueblo llega al punto de asesinar a ese extranjero, un informe en el que los posibles lectores deberán llegar a comprender e incluso justificar tan terrible crimen.

Esa crónica es este libro, informe sobre un asesinato y relato de la escritura del propio informe a un tiempo. Philippe Claudel consigue elaborar una novela a la que en ocasiones le falta ritmo, pero en la que logra describir los entresijos más oscuros del alma humana. Y ante todo el miedo más irracional, ese miedo que lleva a cometer las injusticias más horripilantes. Al fin y al cabo, Claudel hace de su novela una especie de espejo en el que el lector puede ver reflejados los recovecos más putrefactos de la condición humana.

También de Philippe Claudel en ULAD: Almas grisesLa nieta del señor Linh

martes, 2 de febrero de 2010

Yann Martel: Vida de Pi

Idioma original: inglés
Título original: Life of Pi
Año de publicación: 2001
Valoración: Muy recomendable

Al acabar este libro (premio Booker 2002) tuve la sensación de haber leído varias novelas en una. He dicho varias, cuántas, no lo sé ya que todo depende del enfoque. Si nos fijamos en que tiene tres partes muy distintas en forma y contenido, tanto que la primera y la segunda pueden leerse como sendas novelas cortas, ya tenemos dos.

Y, sin embargo, la tercera parte es la que mantiene una diferencia radical con las otras. No puede leerse de forma independiente pero si no la tuviésemos en cuenta, si considerásemos que la historia acaba al final de la segunda, estaríamos ante una entretenidísima novela de aventuras con un desenlace cuya incertidumbre nos mantiene en vilo hasta el final. Por tanto, para que no se nos prive de la diversión sólo hay que evitar esa tercera parte que, además, es bastante corta. Si, por el contrario, permitimos que se nos coloque ante un espejo que, al modo de los del famoso callejón del Gato madrileño y, por tanto, de los Esperpentos de Valle Inclán, nos devuelve una imagen tan desagradable como absolutamente nítida y, sobre todo, fiel en su deformidad al original de las acciones humanas, entonces, nos guste o no, hemos de seguir leyendo. En ese caso, todos los trapos sucios de la humanidad se van a mecer ante nuestros ojos impúdicamente, nos quedará un regusto nauseabundo que no se borrará en mucho tiempo pero habremos aprendido algo, no de la novela en sí misma sino de las reflexiones que ésta, lo queramos o no, va a desencadenar en nosotros. Y no creáis que exagero: al final, quizá ese suelo que antes pisábamos sin dudar de su firmeza empiece a tambalearse un poco.

Esto ocurre y pilla desprevenido al lector porque durante muchas páginas nos parece que estamos leyendo un relato convencional, ligero, entretenido, un poco frívolo incluso. Gran error. "Vida de Pi" habla de la vida, de la relación entre las personas, del arrojo y la cobardía, de la traición, de las múltiples caras de la verdad, de la relatividad de las cosas, de quienes somos en el fondo unos y otros. Y lo hace sin que apenas nos demos cuenta, porque no nos engañemos, estamos leyendo un apasionante libro de acción, cualquier cosa consigue emocionarnos porque el autor sabe como mantenernos en vilo: el movimiento mínimo de una mano, la más
pequeña nube que asoma por el cielo, una sola gota que salpica nos hace temblar y la sacudida es más profunda que todos los terremotos, disparos y desastres naturales que invaden muchas obras intentando conmover a un lector con la piel demasiado curtida para dejarse impresionar por casi nada.

Si, con lo que acabo de explicar, da la impresión que esta novela tiene una estructura complicada, nada más lejos de la realidad. Los hechos se narran por riguroso orden cronológico y con una técnica tan visual y realista que podríamos calificar de cinematográfica ya que sus escenas, más que escritas, parecen enfocadas por una lente.

Después de varios intentos frustrados de adaptación cinematográfica y de encargar el proyecto a tres directores distintos, la película estará dirigida por Ang Lee y se rodará a finales de este año. Su estreno está previsto para la primavera de 2011.

lunes, 1 de febrero de 2010

Shaun Tan: Emigrantes

Idioma original: inglés
Título original: The Arrival
Fecha de publicación: 2006
Valoración: Imprescindible

Me gusta pensar en Emigrantes como una película muda, pues es una novela gráfica atípica, silenciosa, carente completamente de palabras (de hecho, he decidido anotar “inglés” como idioma original única y exclusivamente por el título de la misma). Sin embargo, eso no es un impedimento para que Tan nos cuente la historia de un hombre que abandona su país y a su familia en busca de un futuro mejor.

Este hombre será nuestro guía en un viaje que ninguno de nosotros querría realizar jamás. Le acompañamos así en su tristeza, sus añoranzas, sus dificultades y, sobre todo, la fuerza que una y otra vez le hace levantarse y seguir adelante. Y nos hacemos eco de otras historias parecidas, de otros emigrantes o desplazados que se han visto obligados a abandonar su hogar e intentar labrarse un futuro en un mundo que no es el suyo.

Considero un gran acierto la ausencia total de referencias, pues abre la historia a todo un abanico de posibles interpretaciones. No sabemos de dónde huye en protagonista, ni adónde va. De hecho, el autor construye un mundo onírico lleno de seres extraños y estructuras indefinibles que, rebosantes de carga metafórica, podrían describir cualquier cosa en cualquier lugar. Lo cual nos ayuda a ponernos en la piel de los personajes: ellos no entienden el entorno que habitan, y los lectores tampoco; las letras y los símbolos que encuentran son desconocidos para ellos, así como para nosotros; y el futuro, aquello que encontraremos al volver la página, es igual de incierto para todos.

Muy bien dibujado y con gran maestría narrativa, Tan nos regala una historia universal, tremenda, tan real que nos atrae y asusta al mismo tiempo, de la que mucho se ha dicho y sin embargo queda tanto por decir. Aunque sea sin palabras.

También de Shaun Tan en ULADEl árbol rojoLa cosa perdidaCuentos de la periferia