martes, 18 de octubre de 2016

J. M. Coetzee: Vida y época de Michael K.

Idioma original: inglés
Título original: Life and times of Michael K
Año de publicación: 1983
Valoración: Recomendable

Ahora que se acaba de fallar (con la inevitable polémica) el Nobel de literatura, no está mal volver a uno de los Nobel más indiscutibles del siglo XXI: el sudafricano Coetzee, autor de una obra sólida como pocas en la que destacan novelas como Esperando a los bárbaros o Desgracia. Esta Vida y época de Michael K fue una de sus primeras novelas, y le valió el primer Booker Prize de su carrera. Personalmente, me parece inferior a Esperando a los bárbaros, que había sido su novela anterior, pero en cualquier caso no se puede decir que sea un premio mal atribuido.

Vida y época de Michael K habla de los temas recurrentes de Coetzee: la violencia de su Sudáfrica natal, la lucha por la supervivencia, el conflicto entre el individuo y un poder autoritario, el sentido de la vida humana en medio de la miseria y la guerra... (Curiosamente, para una novela sudafricana escrita y situada en los tiempos de Apartheid, la cuestión racial ocupa un apartado mínimo: solo en una nota de pasada nos enteramos de que el protagonista es un colored male, y del resto de personajes ni siquiera eso. ¿Problemas de (auto)censura?)

Todos estos temas se encarnan en este caso en Michael K, un hombre que nace con un defecto físico (un labio leporino que le dificulta la comunicación), y que vive una vida de aislamiento, reclusión, hambre y persecuciones en el contexto de la guerra fronteriza de Sudáfrica. Cuando su madre enferma y se queda prácticamente inválida, Michael decide cargar con ella en un carro y sacarla de Ciudad del Cabo y llevarla a la tierra de sus antepasados. Tras su muerte, Michael se queda completamente solo en el mundo, e intenta llevar una vida simple viviendo de lo que consigue arrancar de la tierra, algo que no permiten los guerrilleros ocultos en la zona, ni el ejército o la policía, empeñados en criminalizar a Michael y obligarlo a internarse en campos de rehabilitación.

El nombre del personaje, y varios pasajes de la novela (especialmente un diálogo entre Michael y el guardia que protege una puerta) hacen pensar inevitablemente en las novelas de Kafka: Michael, arquetipo del individuo inocente, se enfrenta a un sistema incomprensible e inhumano que lucha por controlarlo, etiquetarlo y ordenar su vida hasta en los aspectos más íntimos. Así, su relación con el poder se convierte en una ejemplificación de lo que Michael Foucault llamó "biopolítica", es decir, el control que el poder ejerce sobre los cuerpos de los individuos, algo que se manifiesta de forma obvia en el capítulo en que los médicos del campo de internamiento insisten en alimentar a Michael, en contra de sus propios deseos.

Creo que a este referente literario y filosófico esencial se pueden añadir todavía algunos otros: el título y la estructura de la novela remiten a la tradición picaresca (que quizás Coetzee conozca directamente, o a través de sus derivados anglosajones): Michael, aunque no tenga muchos amos, es el prototipo del hombre mísero y errante que lucha por su mera supervivencia. Y es también El extranjero, que recorre la vida sin comprenderla y que tiene solo una percepción instintiva, casi animal, de sus necesidades e impulsos. (La relación del Michael con su madre y su muerte son paralelos bastante próximos a la novela de Camus).

A partir de estas líneas y referencias, y con el contexto histórico (aunque vago) de la historia de Sudáfrica, Coetzee construye una novela opresiva, dura como casi todas las suyas, desesperanzada durante casi todas sus páginas (hasta un brevísimo tercer acto que casi parece un epílogo), en la que la solidaridad humana parece casi imposible, o desencaminada, y en la que la soledad y la exclusión de la sociedad parecen ser el objetivo deseable.

Aun siendo una novela intensa e interesante (todas las de Coetzee lo son), me parece inferior a otras suyas. En primer lugar, porque la historia tiene pocos matices y es una consecución de desgracias y desastres que caen sobre Michael como si fuese un Job moderno. Por otra parte, la segunda parte de la novela (situada casi al final) en la que cambia la perspectiva y el narrador, parece un subterfugio técnico, poco justificado narrativamente, para poder explorar y expandir las ideas filosóficas del libro, a través de un personaje manejado por Coetzee para hacer explícitos los temas de la novela. Una distribución diferente de los tiempos de la novela quizás podrían haber ayudado a evitar esa sensación, pero en todo caso, quién soy yo para criticar a un premio Nobel.

Otras obras de J. M. Coetzee en Un Libro al Día: El maestro de PetersburgoElizabeth CostelloLa edad de hierroDesgraciaVeranoHombre lentoDiario de un mal añoEsperando a los bárbaros, Foe

14 comentarios:

Anónimo dijo...

Solo he leído Esperando a los bárbaros y desgracia y me quedo con el 2.

Pd: Cuales serían los 3/4 indiscutiblea premios Nobel de este siglo?

Saludos

Marcela dijo...

Hola! Yo leí su trilogía empezando por "Infancia" "Juventud" y "Verano".Son muy buenos libros; no critico su escritura para nada, es buena literatura, pero en lo,personal.....:
Me pareció que se desgarra las vestiduras siendo él el lado de los afortunados .
Pero para trilogía autobiográfica mi preferida ha sido con Elías Canetti! Empezando con "La Lengua absuelta"
Saludos

Santi dijo...

¡Gracias por los comentarios! Yo creo que me quedo con Esperando a los bárbaros, la verdad. Respecto a la posición personal y política de Coetzee, dado que es una persona que se expresa muy poco públicamente, la única forma de evaluarla es a través de su obra. Quizás podría haber sido más activo en contra de la discriminación del apartheid en su país, pero desde luego sus obras hacen una crítica despiadada de Sudáfrica y sus miserias...

Y respecto a los Nobel indiscutibles del siglo XXI, después de repasar la lista, diría: Kertesz, Coetzee, Pinter, Pamuk, Aleksiévich.

Anónimo dijo...

Pobre Bob Dylan jajajaja

Montuenga dijo...

Hola Marcela. En el blog reseñamos hace tiempo un tomo de la autobiografía de Canetti, La antorcha al oído.
http://unlibroaldia.blogspot.com.es/2012/07/elias-canetti-la-antorcha-al-oido.html?m=1
También, naturalmente, la novela Auto de fe.
Otro Nobel indiscutible, este del s. XX.
Saludos

Montuenga dijo...

Hola Marcela. En el blog reseñamos hace tiempo un tomo de la autobiografía de Canetti, La antorcha al oído.
http://unlibroaldia.blogspot.com.es/2012/07/elias-canetti-la-antorcha-al-oido.html?m=1
También, naturalmente, la novela Auto de fe.
Otro Nobel indiscutible, este del s. XX.
Saludos

Anónimo dijo...

Auto de fe parece una lectura muy dificil. Me equivoco?

Montuenga dijo...

No,no te equivocas.
(Para seguir comentando sobre esto, acudir al post correspondiente)

Montuenga dijo...

No,no te equivocas.
(Para seguir comentando sobre esto, acudir al post correspondiente)

pipo dijo...

Bob Dylan, uno de los grandes compositores de la musica pop folk del siglo XX, junto con John Lennon y Elton John.Incluye en sus grandes canciones unas hermosas letras.De ahi a un Premio Nobel de Literatura va un largo trecho.Bob Dylan no pasará a la Historia de la Literatura.Pasará a la historia de la música.Otro año desperdiciado para el Nobel de Literatura.

Marcela dijo...

Hola Montuenga! Gracias por tu dato sobre Canetti! Ya lo leí! Mil Gracias de nuevo! Saludos

Anónimo dijo...

No sé Santi... Naipaul y Vargas Llosa me parecen dos Nobel más que dignos

Anónimo dijo...

?

MJ dijo...

Hola,

Me encantó la reseña, y me ayudó mucho a entender el libro. Lo único que no comparto es con que "la cuestión racial ocupe un apartado mínimo". Creo que Coetzee trata el tema de una manera implícita, camuflada, recurriendo al lector.
Enseguida después de comenzar el libro, me encontré sorprendida, e incluso algo molesta, con el hecho de que el autor no aclaraba quien era de cual raza. No daba crédito con esta omisión tan importante en países como Sudáfrica!
Sin embargo, en ese momento, caí en la cuenta que no precisaba que me lo dijera. Con cada personaje, con cada diálogo, con cada circunstancia, ya era posible identificar en cada caso, quien era de cual raza. Y creo que en esto es justamente donde radica la denuncia de Coetzee. El blanco y el negro en Sudáfica (como en la mayoría de los países), lamentablemente ocupan roles y lugares muy distintos en la Sociedad. No hay igualdad.

Un comentario a parte, que no supe como interpretar (si es que siquiera tenga interpretación alguna), pero me llamó la atención: el personaje comienza siendo Michael K… luego Michaels.. luego tan solo K.
Será un simbolismo para la degradación del ser humano? No sé realmente…

Me gustó el libro, pero no tanto como “Desgracia”.
Saludos!
Julia