Traducción: Mario Cámara
Año de publicación: 2021
Valoración: Recomendable
Esta es la tercera novela que leo de la brasileña Ana Paula Maia y creo que ya es suficiente para afirmar que estamos ante una narradora muy personal y con un universo completamente identificable. De hecho, las tres comparten atmósferas, escenarios y personajes un poco al estilo de autores como Onetti o Faulkner.
La primera frase de la novela (El fin del mundo está del otro lado de la puerta, pero todavía el no lo sabe) ya nos pone en situación. Algo similar al apocalipsis se cierne sobre la región en la que se mueven Edgar Wilson, Bronco Gil y Tomás, tres soldados contra la escasez y el aislamiento que conviven de una u otra manera con la muerte.
Nuevamente nos encontramos con personajes en situaciones limite: hombres que mueren, hombres que matan, hombres que contemplan cómo una epidemia acaba con los animales y se contagia a los humanos, hombres que descubren a mitad de la novela que, además de la propio epidemia, algo más turbio y oscuro sucede en la zona.
Por lo tanto, De cada quinientos un alma es una novela que podría ser una mezcla de misterio, distopia o ficción especulativa que trae a la cabeza a La carretera de McCarthy o La sequía de Ballard, solo por poner un par de ejemplos.
En cuanto al estilo, la prosa de Maia es seca y, hasta cierto punto, hostil, con una fuerte presencia de lo sensorial y cargada de frases breves que contribuyen a fortalecer la carga apocalíptica del texto. Y pese a que se trata de una novela en la que predominan atmósferas e imágenes, también se observa en ella una buena construcción y desarrollo de personajes.
Dicho esto, me gustaría ver cómo se maneja Maia en un registro diferente. Las tres novelas suyas que he leído están "cortadas por el mismo patrón" y creo que tiene capacidad como para salirse de ese mundo y llevarnos a otros territorios. A ver si se anima!
También de Ana Paula Maia en ULAD: De ganados y de hombres
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