domingo, 16 de septiembre de 2018

Kurt Vonnegut: Cuna de gato

Idioma original: inglés
Título original: Cat's cradle
Año de publicación: 1963
Traducción: del catalán, edición leída, Martí Sales
Valoración: recomendable

Ahí, como un espécimen inclasificable entre contracultura y nuevo periodismo y narrativa contemporánea cuyos grandes bastiones (De Lillo o Pynchon) se mantienen activos, estaba Vonnegut. Un escritor con pinta de cachondo al que hay que tomarse en serio. No es para menos cuando la lectura de esta extraña novela me ha sonado a referencias tan dispares como  Huracán en Jamaica o Merienda de negros, o  Las esposas de Los Álamos, siendo a la vez una sátira sobre el imperialismo yanki y un cruel ejercicio sobre la idolatría, sea esta o no consentida, de héroes nacionales de lo más dispares.
Un joven periodista se obsesiona con la familia de uno de los principales científicos del Proyecto Manhattan. Decide preguntarles qué hacían aquel día: 6 de Agosto de 1945. Sin un motivo concreto, Vonnegut ya ha marcado territorio. El vuelo del Enola Gay y su sórdida misión como hito de la historia americana, como el 22-11-1963, como el 11-9-2001, como esas fechas veneradas por esa nación sedienta de cimentar a toda costa una historia con la valiosa complicidad de los medios de comunicación.
La búsqueda, cómo intenta contactar con los tres hijos del científico (todos ellos seres peculiares, id a saber qué quiso Vonnegut que interpretáramos de sus peculiaridades), cómo se relaciona con ellos y qué dispares circunstancias han tomado tras la muerte de su padre, le llevará hasta San Lorenzo, isla en algún lugar al sur de los Estados Unidos (no es difícil pensar que sea algo parecido a Cuba o a alguna república bananera de las que tanta inestabilidad registraban por los 60) donde un gobierno títere parece dispuesto a abrazar a cualquiera con tal de que acepte presidir su gobierno, a todas luces una tiranía absoluta con la población entregada a una religión inverosímil (el kononismo), religión que parece ser una cortina de humo para controlar a la sociedad, asustada ante un severo castigo cuya amenaza su día a día de forma fría: el gancho en el que los disidentes, los contestatarios, los opositores pueden ser colgados de forma arbitraria.
Aquí Vonnegut derrama acidez a espuertas y es evidente que toma una fuerte voz crítica contra toda la era en que USA se empeñó en maniobrar políticamente en América Latina para evitar que una posible contaminación del caso de Cuba descompensara el precario equilibrio entre bloques de la Guerra Fría.
Una novela corta con evidentes dobles lecturas y que ayuda, a través de escenas surrealistas con toques hilarantes, a conocer la obra de Vonnegut, escritor sin ataduras ni compromisos (incluso poco dado a alinearse con corrientes literarias) que muestra aquí una excéntrica creatividad que deleitará a los curiosos.

También de Vonnegut en ULAD: Matadero cincoUn hombre sin patria, Madre noche, Barbazul

4 comentarios:

Sísifo dijo...

He leído la mayoría de las novelas de este autor y esta sin duda es mi favorita. Vonnegut es un autor que sin aportar mucho ofrece entretenimiento seguro, que no es poco.

Lupita dijo...

Pues a mí me fascina Vonnegut , y me parece que dista mucho de ofrecer sólo entretenimiento. Es divertido, mordaz, audaz, crítico y también hace pensar.
Supongo que lo que vivió en la guerra le cambió para siempre, y le hizo tener esa visión corrosiva, y hasta despiadada del ser humano.

Saludos

Paco dijo...

Pues a mi me parece un magnifico libro, que tambien te hace pensar y a la vez divertido. Para mi, una pequeña joya

Francesc Bon dijo...

Queridos comentaristas: recomiendo la novela, no me muestro crítico excepto por la enorme carga surrealista de las situaciones, que a veces cuesta asimilar. Y de su profundidad como excitadora de paralelismos no he dudado un segundo. Gracias por los comentarios.