miércoles, 25 de septiembre de 2024

Raúl Ariza: Trilogía elefantiástica

Idioma original: Español  
Año de publicación: 2024
Valoración: Está bien

La Trilogía elefantiástica compila varios textos (revisados para la ocasión) que se publicaron originalmente en las antologías de Raúl Ariza Elefantiasis (2010), La suave piel de la anaconda (2012) y Glóbulos versos (2014). 

Dichos textos son mayoritariamente relatos de dos páginas de extensión (ahora mismo sólo me vienen a la cabeza cuatro relatos que se alargan hasta las tres páginas), aunque también hay un puñado de poemas salidos de Glóbulos versos. Se ciñen a un registro realista (salvo "Crisis", que narra un fin del mundo inminente), comparten un estilo directo no exento de lirismo y abordan temas similares.

En general funcionan. Sin embargo, no todos lo hacen con la misma efectividad; a eso hay que sumarle que, leídos de corrido, son redundantes (pues exploran temas como la incomunicación entre seres humanos, la soledad, el deseo reprimido o la frustración existencial desde ángulos parecidos) y acusan ciertos vicios estilísticos que no me acaban de convencer (por ejemplo, poner algunas acotaciones de los diálogos en una nueva oración con la primera letra en mayúscula).

También reprocharía a los textos de Ariza que muchos de ellos podrían pulirse. Aquellos que tienen narradores en primera persona no siempre son del todo verosímiles; en "El ruido y el frío" o en "Superhéroe", por ejemplo, se me ocurren un par de ideas para que la voz de niño del primero, y la del narrador en tercera persona centrado en un niño del segundo, sean más convincentes. Asimismo, a los que se cierran con un giro les convendría buscar opciones más imaginativas, ya que en casi todos se revela al último momento una relación adúltera o un crimen pasional.

Así a groso modo diría que en La suave piel de la anaconda se hallan relatos más refinados del volumen. También los hay bastante buenos en Glóbulos versos, acompañados por sus interesantes contrapartes de prosa poética.

Estas piezas de prosa poética de Ariza también son destacables, por cierto. Sin ser yo un admirador del género, admito que algunas de ellas me han llegado a conmover, en ocasiones incluso más que su versión narrativa. Es el caso, por ejemplo, de "El viajero imaginario", cuyos versos (probablemente asimilados perfectamente gracias al contexto que da previamente el relato del mismo nombre) comparto a continuación:

«Hice el petate
-cuatro cosas, tres poemas y algún sueño-
y me puse a caminar
Doblé dos esquinas que 
resultaron fronteras
y me adentré en selvas
vírgenes como mis 
sábanas
También me bebí vasos
llenitos de ríos con
caimanes y trepé
bordillos del tenor
de un Himalaya

Era ya tan viejo
cuando me anudé los 
zapatos para partir»

Para ir terminando querría mencionar que Trilogía elefantiástica parece haber recibido mimo tanto del autor como de Talentura, la editorial que la publica. Aunque, eso sí, criticaría a ésta última por recurrir a imágenes generadas con IA; no entraré en la ética de semejante proceder, pero diré que las ilustraciones obtenidas se antojan sumamente genéricas.

1 comentario:

Juan Zara dijo...

¡Hola! Quería hacer un comentario al margen de la reseña, si no es molestia. Donde decís que Ariza hace "prosa poética" en realidad, según lo que citaste, es un poema narrativo (sigue siendo narrativo, pero es verso, no prosa). Sólo eso.