viernes, 5 de febrero de 2021

Dalton Trumbo: Johnny empuñó su fusil

Idioma original: inglés
Título original: Johnny got his gun
Año de publicación: 1939 (2020 edición reseñada)
Valoración: Muy recomendable




Dalton Trumbo, novelista, guionista y director de cine, publicó en 1939 (tras la patente catástrofe que supuso la Primera Guerra Mundial) la que se considera aún hoy la novela anti belicista por excelencia; no es que sirviera de mucho visto lo visto, pero Johnny empuñó su fusil sigue siendo un magnífico ejercicio literario cargado de humanidad y reflexiones totalmente vigentes.

Resumen resumido: el joven Joe Bonham yace desorientado en una cama de hospital. Poco a poco va tomando conciencia de su situación; un obús en el campo de batalla le ha dejado sin brazos, sin piernas y sin cara, por lo que está desprovisto del habla y de todos los sentidos a excepción del tacto. Es un hombre atrapado con sus pensamientos cuya única conexión con el mundo exterior son las sensaciones que percibe a través de la piel.

El planteamiento no deja indiferente y se desarrolla con eficacia a lo largo de toda la novela. El autor sostiene con éxito esta narración atrapada dentro de una mente prácticamente aislada, mediante la sabia combinación de tres recursos:
  • Una voz narrativa en tercera persona que se camufla como flujo de conciencia del propio Joe. Su voz es uno de los elementos que más cautiva al estar llena de matices y transmitir tan bien la complejidad del momento vital del muchacho. El lector confía en él desde el primer momento; es un joven genuino e inteligente que se ha visto obligado a madurar forzosamente en insólitas circunstancias. Es un niño y un hombre, es víctima pero no se victimiza y quiere luchar por su vida pero no del modo que le han enseñado. Su penosa situación, lejos de llevarlo a la locura como bien podría haber sucedido, lo conduce hacia una formidable lucidez que, sin embargo, no puede compartir con nadie.
  • Joe deambula la mayor parte del tiempo entre los recuerdos y las ensoñaciones, todos ellos (sobre todo los recuerdos) narrados con gran sensibilidad y una capacidad evocadora arrolladora que contrasta con su situación presente.
  • Los momentos puntuales de conexión con el exterior que se convierten en auténticos hitos para el protagonista y el lector: desde las visitas sistemáticas de la/s enfermera/s hasta los matices térmicos sobre la piel que le permiten empezar a ejercer cierto control sobre el transcurso de tiempo. Dichos momentos van ampliándose y alcanzando mayor interés a medida que Joe adquiere nuevas habilidades que le conducen hacia el desenlace de la obra.
El tema principal de Johnny empuñó su fusil es sin duda el anti belicismo; combate contra toda la maquinaria ideológica que engaña a tantos jóvenes para embarcarlos en un viaje del horror cuyos verdaderos fundamentos desconocen. A través de Joe, un muchacho que atrapado en su mínima expresión física alcanza altísimas cotas de humanidad y lucidez, Dalton Trumbo despliega todo su argumentario para desactivar los mensajes populistas siempre sostenidos por conceptos abstractos e intangibles:
«Y cuando no podían enganchar a los pobres diablos para luchar por la libertad o la independencia o la democracia o la decencia o el honor usaban a las mujeres. Miren esos puercos alemanes decían miren cómo violan a las hermosas muchachas francesas y belgas. Alguien tiene que acabar con esa violación. Venga usted jovenzuelo únase al ejército y salve a las hermosas muchachas francesas y belgas. Y entonces el chaval se quedó perplejo y firmó y poco después estalló una granada y su vida se esparció en roja pulpa de carne y quedó muerto. Muerto por otra palabra y por todos los viejos y feroces murciélagos de la DAR que salen gritando ¡viva! sobre su tumba hasta quedarse roncos porque murió por la feminidad.»
Otras cuestiones que orbitan alrededor del tema principal son:
  • El papel que juega la medicina en contextos guerra. Joe se siente como un experimento con el que se han explorado nuevos límites sin tener en cuenta que un cuerpo con vida no es nada si se le despoja de su dignidad.
  • Qué significa estar vivo. Joe reflexiona sobre su situación (una mente intacta aislada dentro de un cuerpo mutilado) y la compara con la de otros soldados cuyo cuerpo está intacto pero su mente enloquecida los mantiene igualmente aislados del mundo. Estar vivo es, al fin y al cabo, estar conectado con el mundo que te rodea.
  • Qué es lo que verdaderamente importa en la vida, qué elementos hacen de nuestra existencia una experiencia que valga la pena: el presente, nuestras relaciones, las cosas concretas que podemos percibir con los sentidos, lejos de los ideales abstractos que no podemos asir.
Y siempre, sobrevolando muy veladamente, la pregunta ¿vale la pena vivir según que vida?.

Así que Muy recomendable por lo arriesgado del planteamiento y la indudable habilidad con la que se resuelve, porque literariamente transmite, revuelve y obliga a la reflexión, y porque considero que las obras que abordan cuestiones difíciles o comprometidas merecen una consideración especial. Mientras leía Johnny empuñó su fusil no me quitaba de la cabeza lo mucho que disfruté también Primera sangre de David Morrell, otra gran novela anti belicista abordada desde un prisma muy diferente y más actual.

Johnny empuñó su fusil tiene una adaptación al cine de 1971 con el mismo título y dirigida por el propio Dalton Trumbo. Al parecer, la cinta se ciñe con fidelidad a la obra original con un pequeño viraje final que en la novela no queda reflejado aunque el mensaje, como ya se ha mencionado, la sobrevuela veladamente: la apología de la eutanasia. Es indudable que tal mensaje ya estaba en la mente del autor cuando escribió la novela y que no fue hasta casi treinta años más tarde que se atrevió a exponerla abiertamente en la película.

Ya para terminar, decir que Johnny empuñó su fusil no parece a priori un título que albergue mayor doblez; tenemos un protagonista, Joe (Johnny) que ha ido a la guerra y para ello ha tenido que empuñar necesariamente su fusil. Sin embargo, Dalton Trumbo eligió cuidadosamente este título en clara respuesta a la canción belicista Over there de George M. Cohan en la que se animaba encarecidamente a los jóvenes patriotas estadounidenses a alistarse en la guerra, alentándolos con la frase «Johnny, get your gun». Efectivamente —trata de decirles con su novela Dalton Trumbo a todos esos jóvenes— Johnny empuñó su fusil y ved para lo que le sirvió.

18 comentarios:

Lupita dijo...

Querida Beatriz:
Ayer estaba yo buscando este libro en la biblioteca (que no estaba) y hoy lo reseñas. ¿No es una casualidad enorme?
Como ya estaba convencida de querer leerlo, tu reseña ha venido a recordármelo aún más; supongo que me gustará, por las mismas razones que tan bien has expuesto.

Volveré para contrastar valoraciones (en diferido)
Saludos antibelicistas



Gerónimo dijo...

Hola,

Leí este libro hará unos 30 años. Es de los que te acompañan toda la vida.
Esta muy buena reseña me ha hecho recordarlo, especialmente me ha vuelto a emocionar "los momentos puntuales de conexión con el exterior" que mencionas.

Estoy de acuerdo que es un libro cargado de ideología, pero el drama personal del protagonista, su diálogo interior es inolvidable.

Tuve la enorme suerte de leerlo sin saber de que iba y me impactó. Es una pena que la gran mayoría se acerque a él sabiendo de que va. No sé como se puede mejorar esto.

Saludos

Pepe M. dijo...

Buenos días, no sabía del libro que has reseñado magníficamente.
Conocí la película que es buenísima. Cuando la estrenaron, creo que a finales de los 70, tuvo un gran impacto.
Un saludo.

Juan G. B. dijo...

Ya que estamos, recordemos que también hay una película, de hace pocos años, sobre el propio autor de la novela, luego guionista y director de la película, titulada, cómo jo, "Trumbo" (también podía haberse llamado "Dalton").

lacris dijo...

Recuerdo que la película me causó mucho impacto de adolescente y luego me di cuenta que mi padre lo tenía en la biblioteca en una edición de Bruguera, creo.

Vale la pena tenerlo y recomendarlo porque es de esos difíciles de olvidar.

Tengo curiosidad por si está traducido igual porque entonces renovaría mi edición.

Gracias por recordarme este gran libro

Emi Lee dijo...

Una novela que me impresionó hondamente. Una mañana mientras lo leía, viajando en tren, coincidió el amanecer con sus primeros rayos del sol golpeando mi cara y el sol bañando de sensaciones el cuerpo de Johnny. A día de hoy, hay días que, cuando amanece y me da el sol, recuerdo ese día en el tren y lo profundo que me marcó. Grande Trumbo.

Montuenga dijo...

No conocía la novela, pero pusieron la peli en el cine de mi facultad cuando estaba en 1° y me duró la depresión más de un mes. En libro debe ser todavía más impactante, me corroe la curiosidad pero creo que es la historia más dura que he visto o leído nunca y con una vez basta.
Tu reseña, tan magnífica como el libro.

Anónimo dijo...

Hace poco mencioné a Dalton Trumbo en ULAD, a raiz de la reseña sobre una biografía de Stanley Kubrick, ya que fueron respectivamente guionista y director de Espartaco. No recordaba que había escrito la novela en la cual basó su película de 1971, sobrecogedora. Un grande, sin dudas. Un hombre de principios, no los de Groucho Marx, que se plantó ante la intolerancia del mccarthismo (se puede apreciar en la muy buena película que menciona Juan).
Excelente reseña, Beatriz. Leyéndola me vino a la mente uno de los últimos libros de Philip Roth, Indignación, que evidentemente se ha nutrido de esta novela.

El Puma

Dr. Fabián dijo...

Excelente e impactante novela. En la edición que leí, además Trumbo cuenta que el libro antibelicista fue utilizado en la segunda guerra por los movimientos pro nazis evitar la intervención de Estados Unidos. Y que él tuvo que impedir en ese caso la reimpresión. Y cómo se "reivindicó" cuando lo usaron los pacifistas para Vietnam. Acá en Argentina circuló, además, una traducción de Rodolfo Walsh que recuerdo que me pareció buenísima.

Gabriel Diz dijo...

No voy a ser yo quien defienda la violencia como método de resolución de conflictos. Pero me pregunto si hay alguna otra alternativa con tipos como Hitler. La guerra es un horror pero como parar a un maniático de ese estilo? Sabemos que es el emergente de la postración de Alemania tras la primera guerra pero aún así cuando esas tragedias históricas se desatan no tengo muy claro que la salida pueda ser diplomática.
De todas maneras viendo a Trump como presidente de EEUU no estoy tan seguro que los nazis hayan perdido la segunda guerra....:

Luis G dijo...

Que sea la novela antibelicista por excelencia es una afirmación tan rotunda como discutible. "La vida en la tumba" de Myrivilis, "Sin novedad en el frente" de Remarque, "Senderos de gloria" de Hobb son sólo tres de las varias que le podrían discutir ese título. Pero no es lugar de escribir aquí un ensayo sobre este asunto. Eso ciñéndonos exclusivamente a la novela del siglo xx. Si lo ampliamos a todas las épocas la tertulia sería casi infinita. Al margen del cine dónde el debate sí que no acabaría nunca.

Eso no quita para compartir que es una novela tan magnífica como dura. y..aleccionadora?

Muy recomendable, casi imprescindible

Beatriz Garza dijo...

Lupita, qué casualidades tan sorprendentes! pues me alegra que estés "en ello" y deseando leer tu opinión.
Un abrazo.

Gerónimo, totalmente conforme. De todas maneras yo lo leí sabiendo de qué iba e igualmente me sorprendió muchísimo. El "cómo" a menudo tiene tanto peso como el "qué".
Gracias por comentar.

Pepe, gracias por pasarte!

Juan, sí, la tengo pendiente. Por lo visto este hombre fue uno de los perseguidos durante la famosa "caza de brujas".
Saludos, compa.

lacris, pues desconozco si se ha actualizado la traducción pero desde luego que sí hay reediciones recientes como la que he leído yo que es de 2020, el año mágico :D
Un saludo.

Emi Lee, se me ha puesto la piel de gallina con lo que has explicado. La literatura es realmente poderosa.
Gracias por tu aportación.

Montuenga, pues sí que es dura, sí. Lo que pasa es que los pasajes evocadores y la fortaleza con la que el protagonista enfrenta su situación, para mí son un contrapunto que la hace mucho más llevadera.
Gracias por pasarte, compa.

Puma, recuerdo tu mención. Y ahora me has picado con lo de Philip Roth... maldita sea!
Gracias por pasarte!

Dr. Fabian, lo que explicas me parece increíble. Muchas gracias por tu aportación!

Gabriel, desde luego que sobre papel se ve muy claro pero la realidad es demasiado compleja y está demasiado infectada de intereses individuales. Que es lo que viene a decir Trumbo de algún modo.
Gracias por comentar.

Luis G., en ULAD nos permitimos ser rotundos siempre que lo creemos conveniente porque estamos en un blog amateur y no en una cátedra de literatura comparada. De cualquier forma es bien recibida cualquier discrepancia que se exponga de manera educada y argumentada. Estoy segura de que los títulos que has mencionado tentarán a más de un colaborador o visitante del blog, así que muchas gracias por tu aportación.

lacris dijo...

Muchas gracias. He preguntado en la librería y me han confirmado que la edición que has leído es con nueva y mejorada traducción. Y me hice con él.
Lástima que el de Indignación no lo tenían porque me ha picado por el tema de la guerra de Vietnam y el autor me gusta mucho.

Sobre el comentario de las novelas relacionadas me apunto Myrivilis, autor griego del que no sabía nada ;)

Gracias Beatriz

ChuangTzu dijo...

Los argumentos antibelicistas suelen ser demasiado simplistas. Casi nadie está en contra de la guerra en todas las circunstancias. Eso lleva a estas situaciones. El autor de una novela antibelicista defendiendo la guerra escasos años después. Si no es como la famosa frase de Groucho Marx, se le parece mucho.

Anónimo dijo...

Trump ha sido el presidente norteamericano menos intervencionista militarmente en décadas, eso sí, el nazi es él y Obama es Nobel de la Paz. En fin, Serafín.

https://www.elconfidencial.com/mundo/2020-09-20/es-donald-trump-el-presidente-mas-pacifista-en-decadas_2749591/

Anónimo dijo...

Una mentira repetida mil veces, con Trump se multiplicó el bombardeo de Yemen y empeoró las relaciones contra Irán, Arabia Saudí o Cuba, sin contar su política en la frontera con más de 500 niños separados de sus padres (deportados a países de Centroamérica).

Anónimo dijo...

Los bombardeos en Yemen es cierto, comenzaron en 2002 con Bush, y Obama y Trump los continuaron. El resto que comentas no son intervenciones militares.

Víctor L. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.