Año de publicación: 1991
Valoración: Está bien
Harto irregular, esta antología. En registros, en géneros y en calidad. Sobre todo en calidad. Curioso, teniendo en cuenta que los diez relatos compilados en ella fueron escritos, seleccionados y ordenados por el mismísimo Adolfo Bioy Casares.
Posiblemente sea injusto con El lado de la sombra. Quizás el libro me ha sabido a poco porque mis expectativas eran altísimas; supongo que el saber que los textos aquí reunidos venían firmados por Casares es lo que ha hecho que me decepcionaran.
Del conjunto, los mejores son "El lado de la sombra" y "Los afanes". No en balde, Casares los sitúa estratégicamente: inauguran y cierran respectivamente el volumen. Ambas piezas, autónomas, abordan de forma complementaria los temas tratados en la magistral novela La invención de Morel.
"La obra" y "Carta sobre Emilia" son cuentos que están bien escritos y gozan de un trasfondo relativamente interesante. Aunque, insisto, se quedan frustrantemente cortos para el genio de Casares.
También destacaría "El calamar opta por su tinta" y "Un viaje o El mago inmortal", diabluras humorísticas que, gracias a su humildad, funcionan perfectamente. "Un león en el bosque de Palermo" intenta seguir la misma tónica, pero la falta de mala leche y la solemnidad de su final hacen naufragar a esta historia.
"Cavar un foso" cumple como narración criminal sin demasiadas ínfulas. "Paradigma" y "Cuervo y paloma del doctor Sebastián Darrés", por su parte, parecen borradores a cuyo argumento hay que dar un par de vueltas.
Lo dicho: estamos frente a una antología irregular. Una que, repito, cuesta creer que haya salido de la pluma de Casares. No la recomiendo entera. Si acaso, leed "El lado de la sombra" y "Los afanes" aquellos que, como yo, amasteis La invención de Morel. Los demás relatos son totalmente prescindibles, por mediocres y poco memorables. Creedme cuando os digo que no tardarán en desvanecerse en vuestra memoria.
También destacaría "El calamar opta por su tinta" y "Un viaje o El mago inmortal", diabluras humorísticas que, gracias a su humildad, funcionan perfectamente. "Un león en el bosque de Palermo" intenta seguir la misma tónica, pero la falta de mala leche y la solemnidad de su final hacen naufragar a esta historia.
"Cavar un foso" cumple como narración criminal sin demasiadas ínfulas. "Paradigma" y "Cuervo y paloma del doctor Sebastián Darrés", por su parte, parecen borradores a cuyo argumento hay que dar un par de vueltas.
Lo dicho: estamos frente a una antología irregular. Una que, repito, cuesta creer que haya salido de la pluma de Casares. No la recomiendo entera. Si acaso, leed "El lado de la sombra" y "Los afanes" aquellos que, como yo, amasteis La invención de Morel. Los demás relatos son totalmente prescindibles, por mediocres y poco memorables. Creedme cuando os digo que no tardarán en desvanecerse en vuestra memoria.
Otras obras de Adolfo Bioy Casares en ULAD: Aquí
6 comentarios:
Hola Oriol:
Hasta los genios (como Bioy) tienen altibajos.
Gracias por la reseña
Nos pasa por tener a Bioy en un pedestal.
Se ve que era humano el hombre.
Igualmente le daré una oportunidad cuando lo encuentre, aunque solo sea por ese par de relatos que comentas.
Totalmente de acuerdo contigo, Gabriel. Nadie es infalible, ni siquiera los genios.
Y ya sé, Lucas, que las expectativas han jugado en mi contra; reconozco, incluso, que he podido ser injusto con "El lado de la sombra" por esta razón. Sin embargo, no puedo evitar tener a Casares en un pedestal, pues escribió "La invención de Morel" con sólo 23 años. ¡23 años!
Para un autor de semejante magnitud, estos relatos se quedan muy cortos. Ya digo en la reseña que son mediocres (a excepción de alguno que otro). En otras palabras: no están mal, pero podrían haber sido mucho mejores. Y lo que me extraña es que la antología entera la concibiera Casares, que no sean descartes suyos publicados póstumamente por alguna editorial que quiere rascar unas ventas a costa de un nombre consagrado.
Pero es que Bioy era eso, la novela corta que dices es una excepción en su currículo. Escribió sobre todo relato realista muy satírico y divertido y con mucho doble sentido y mucha mala milk. Sus personajes están en los ambientes que él conocía por pertenecer a ellos y eran la alta burguesía Argentina de aquella época. Eso ya no existe, ni aquí ni en ningún sitio. Pasa una cosa, si no te sitúas en el contexto histórico y geográfico puede que desprecies o te pase desapercibido algo que tiene mucho valor. Y eso es el currículo de Bioy.
Anónimo, puede que tengas razón en que el registro más habitual de Casares es el costumbrismo satírico (no todos los cuentos de "El lado de la sombra" son realistas, pero sí que comparten en general un cierto sentido del humor, a veces cáustico y otras blanco). Sin embargo, yo me refería a que esta antología dista mucho de "La invención de Morel" y otras obras del escritor argentino en calidad literaria, no necesariamente en tono, género, etc...
Debo insistir en que los cuentos aquí compilados me parecen demasiado normaluchos. Buena prosa, un humor que funciona e ideas interesantes de tanto en tanto, pero nada del otro mundo.
Completamente de acuerdo Oriol. Mayor Thompson
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