domingo, 27 de octubre de 2019

László Krasznahorkai: Tango satánico


Idioma original: Húngaro
Título original: Sátántangó
Traducción: Adan Kovacsics
Año de publicación: 1985
Valoración: Muy recomendable

Leer Tango satánico no es fácil. Uno avanza por esta novela exhausto, azotado por la lluvia, con los pies hundidos en el fango. Como he dicho, leer Tango satánico no es fácil. Quizá por esto llegar a su final resulte tan gratificante. Aunque, bien pensado, este final no es un verdadero final. Sólo un alto en el camino. Un alto que se hace en una fonda sórdida, donde se sirve alcohol barato, donde los parroquianos no tienen qué decirse. Un alto en una fonda llena de humo y miseria. Una fonda infestada de arañas. 

Leer Tango satánico no es fácil. En primer lugar, porque sus temas (el caos, la pobreza, la soledad, la decepción...) son extremadamente ásperos. Además, porque estilísticamente es un reto. Oraciones larguísimas; capítulos que son un único párrafo monolítico interrumpido solamente por alguna que otra pausa misericordiosa. Todo aderezado, eso sí, con un interesante subtexto político, religioso y existencialista. Con una potente imaginería. Con referencias a Kafka y a Beckett. Con un sentido del humor cáustico y descarnado. Con el magnetismo de Irimiás. 

En definitiva, pese a que no es fácil leerlo, Tango satánico es un novelón. Uno sorprendentemente redondo. Digo sorprendentemente porque László Krasznahorkai es ambicioso en forma y fondo y, aun así, logra estar a la altura de las expectativas. Digo sorprendentemente, también, porque esta es la ópera prima del autor. ¡Menudo talento tiene, el tío! De veras, puestos a buscarle defectos a este libro, sólo se me ocurre que algunos de los espaciados que fragmentan sus capítulos se antojan gratuitos. Nada más.

Por cierto, existe una adaptación cinematográfica de Tango satánico. La dirigió Bela Tarr, está en blanco y negro y dura la friolera de siete horas. Sin lugar a dudas, los creadores de culto se atraen unos a otros.

16 comentarios:

Antonieta dijo...

Poética reseña, me ha gustado. Y me dio ese ambiente de sofoco. Además, cada párrafo es como el libro entero: comienza denso y luego se aligera.

Juan G. B. dijo...

La novela no sé, pero el título no puede molar más...; )

Antonieta dijo...

JA,JA,JA, apoyo!!!

Diego dijo...

En mi opinión, tanto Krasznahorkai como Peter Nadas son más que dignos como para que el Nobel premie las letras húngaras. Pero parece que los suecos no están por la labor.

Buena reseña de un autor que merecía estar aquí.

Oriol dijo...

Antonieta, me alegra que te gustara la reseña. El primer párrafo es una referencia directa al libro, y no tenía muy claro si eso iba a confundir a los que no lo han leído. Si queda poético, eso que salgo ganando.

Ah, déjame decirte que, en mi opinión, "Tango satánico" no se aligera nunca. Ni en forma, ni en fondo. El final parece aportar algo de esperanza, pero ésta se antoja quebradiza, cuando no directamente quimérica.

Juan, concuerdo en que el título es la hostia. Sobre todo en húngaro: "Sátántangó". Insuperable.

Por cierto, esta novela es de las que te gustaría. Gente empobrecida + resurrecciones, asesinatos gatunos, apariciones fantasmales, arañas... John Steinbeck escribiendo terror.

Diego, ¿me recomiendas algún otro libro de László Krasznahorkai con el que continuar? Éste ha sido mi primer contacto con el autor, y ya estoy ansioso por continuar leyéndole. También me apunto a Péter Nádas, de quien nunca antes había oído hablar.

Koldo CF dijo...

No he leído ni a Krasznahorkai ni a Nadas, pero hay un montón de autores húngaros, serbios, etc que habrían sido merecedores del Nobel: por ejemplo, Tisma o Kis.

Pero la Academia tiene criterios que la razón no entiende.

Apuntado queda, Oriol

Maqroll dijo...

Soy fanático de LK desde “Y Seiobo descendió a la tierra”. Es brutal, tanto sus textos como las adaptaciones literarias que hace él mismo con su amigo Bela Tarr. Oscuridad Pura. Otro novelón tremendo es “Melancolía de la resistencia”, más desarrollado que este tango, un ejemplo tan amargo.
Y por cierto, la película Satantangó es inconmensurable.
Saludos

Diego dijo...

En realidad solo conozco otras dos de sus obras. Mi grandilocuencia (al pedo) ofreciéndoles el Nobel, se debe a que una vez leí a Mario Bellatin dando razones para que uno de los húngaros se lo lleve. Me parecieron convincentes.
Con Krasznahorkai, Acantilado nos ha hecho un buen favor pero no pasa lo mismo con Nádas, quien, al igual que a Vollmann, me gustaría recibieran el galardón solo por el hecho de que así alguien se digne a traducir y publicar sus obras.

En fin, Melancolía de la resistencia es la recomendación, sin lugar a dudas. La otra obra que conozco: Al norte la montaña, al sur el lago, al oeste el camino, al este el río... es menos ambiciosa pero sospecho también gustará ya que te creo admirador de la cultura nipona.

Diego dijo...

De acuerdo contigo, Koldo.
A la polaca de este año no la conozco pero a Handke lo leí dos veces y ambas me pareció soporífero. Llegué al final porque parecía que encontraría un premio, porque la extensión engañaba y, resulta que el premio solo se lo llevó él.
Pero bueno, seguro que los de Estocolmo saben más que nosotros y, al parecer, los líos relacionados con la política están mejor vistos hoy que en tiempos de Borges.

Anónimo dijo...

Después de leer 'Seiobo descendió a la tierra' y 'Tango Satanico' solo diré una cosa. László Krasznahorkai es un coñazo y un soponcio mayúsculo. Intrascendente es la palabra. Cada cual es libre de leer lo que desee, pero yo no perdería mi tiempo en leer a este señor con todo lo que hay por leer. Dicho esto, tanto Tisma como Danilo Kis tienen muy buena pinta y más pronto que tarde caeran.

Oriol dijo...

Apuntados las obras de László Krasznahorkai recomendadas.

Y Diego, igual que el tal Mario Bellatin (no le conozco) otorga el premio Nobel al escritor que nos atañe, también lo hace Outis Lee, lector de cuyo criterio me fío muchísimo, en este vídeo: https://www.youtube.com/watch?v=IqJnCCnLSmk

Anónimo dijo...

Hola, hace un año me descubrieron a este autor y ya he leído tres de sus obras, la última este Tango Satánico. Creo que casi ningún escritor actual me ha enganchado tanto como él. A pesar de que su estilo monolítico en crear textos sin apenas párrafos sea una gran barrera. Guerra y Guerra me parece una obra sublime y quizás el que más me enganchó, con un final absolutamente descomunal que incita a indagar más allá del libro. Melancolía de la Resistencia tiene un inicio áspero y difícil (creo que como casi todos sus libros) pero una vez te engacha en la vorágine de eventos y personajes no puedes parar de leerlo.

Oriol dijo...

Me alegra que "Tango Satánico" te haya gustado, Anónimo. ¿Te puedes creer que, pese a lo mucho que me entusiasmó a mí, todavía no he leído nada más de Krasznahorkai? ¡Habrá que remediar eso!

Antonio R. dijo...

Cartarescu, Ernaux, Aira, Piglia, Goytisolo, Ulitskaya, Calasso....Krasznahorkai!!!

Bienvenido al club de los Formentor!!!

Gerónimo dijo...

No he leído Tango Satánico. Me he peleado con Melancolía de la resistencia hasta la página 150 y me he rendido. La reseña en mucho aspectos es también aplicable a Melancolía...
Lo pillé con muchas ganas, tras vuestras buenas críticas, premio Formentor 2024, Ed. Acantilado... y me he llevado un chasco.

Iba muy perdido, no sé de que me hablaba. Igual me faltaban referencias. Y me aburría soberanamente.
Con el Ruido y la furia me paso algo parecido. Llegué a la página 100 y no me enteraba de nada. Pare, fui a google, lo retomé y lo disfrute hasta la última página.
Con este no he tenido ganas de hacerlo, me ha parecido que no valía la pena.
Me sabe mal, y me alegro por los que lo habéis disfrutado

Saludos

Gerónimo

Oriol dijo...

Hola, Gerónimo.

Pues siento que tu experiencia lectora con Krasznahorkai haya sido tan mala. Personalmente te aconsejaria que, pasado un tiempo, te sobrepongas a tu disgusto y le des un tiento a "Tango satánico". Es lo único que he catado del autor a día de hoy, pero creo genuinamente que es muy bueno y que, pese a su relativa dificultad, resulta sumamente disfrutable. Incluso se lo recomendé a una amiga menos abierta literariamente que yo y le encantó.

Gracias por tu comentario.