Año de publicación: 2009
Valoración: Recomendable
A mí me resultaba curioso que haya habido una Unión Europea antes que una Unión Latinoamérica, por varios motivos. Primero, porque ni siquiera la mayoría habla un mismo idioma. Segundo, porque había diferencias económicas brutales de unos países a otros. Y tercero, y quizá el más impactante de los motivos: sus principales locomotoras se habían enzarzado en dos guerras brutales el siglo pasado. Entonces, ¿por qué Latinoamérica, a priori con muchas más facilidades, no ha conseguido ser un bloque común en el panorama mundial? Más bien todo lo contrario, se ha convertido en el bloque de todos contra todos. A estas y a otras preguntas es a lo que intenta dar respuesta Oppenheimer, y en mi opinión lo consigue.
En realidad, este libro es el conjunto de las mejores columnas desde 2006 al 2009 de Oppenheimer, coganador del premio Pulitzer entre muchos otros premios. Tiene una estructura clara en la cual expone el problema, luego presenta los argumentos a favor y en contra mediante entrevistas exclusivas con los protagonistas en disputa y termina con su opinión personal. Es decir, es un libro “para tontos”, si fuese más fácil de leer sería el libro de “Teo en Latinoamérica”. Esto está lejos de ser una crítica, de hecho es un argumento a favor, ya que si voy a leer un libro de política ajena no pido una prosa excelsa, pido esto exactamente, que me lo expliquen con claridad, de forma amena y bien escrito.
Algo que también se agradece al autor es su optimismo, ya que cree firmemente que todo se puede arreglar y no duda en dar un tirón de orejas a las clases acomodadas o a sus vecinos estadounidenses, pero siempre manteniendo la responsabilidad de los latinoamericanos por la situación actual de Latinoamérica, algo que hace mucha falta, ya que por lo que he podido comprobar llevan unos 200 años echando balones fuera.
Al margen de lo bien que pueda quedar uno en una cena hablando de estos temas, que realmente son de rabiosa actualidad, para ayudar a Latinoamérica a salir del agujero en el que se halla primero hay que entenderla. En muchas ocasiones intentando ayudar se ha hecho mucho daño, como las ONGs francesas que financiaban a Sendero Luminoso. Y deja bien claro que no hay dictaduras buenas, ni de izquierda ni de derechas, ya que son un lastre para esta región.
Para finalizar, me quedo con la idea del autor, en la que expresa el deseo de que el título de este libro pierda vigencia muy pronto, y podamos ver una Latinoamérica como se merece: próspera y unida.
Firma invitada: Marta
6 comentarios:
¡Bienvenida, Marta! Gracias por animarte a colaborar en el blog... y espero que solo sea la primera de muchas :)
Me ha dado muchas ganas de leer el libro y tratar asimismo de entender mejor las relaciones entre los paises de Sur America ! Muchas gracias Marta
Gracias Marta, también a mi me da realmente ganas ahora de leer este libro !
Private joke: el hecho que resaltes las ONGs francesas en el problema del Sendero... es todavía debido a algún rencor por lo de las fresas? jajaja
Si quieres entender bien latinoamérica ... primero te recomendaría que te leyeras "Las Venas Abiertas de LatinoAmérica" de Eduardo Galeano, y luego, para entender porqué está como está ... te aconsejo el libro "Confesiones de un Gángster Económico" ... que es una pasada lo que te cuenta John Perkins.
(El primero es una explicación más histórica sobre la explotación de latinoamérica en la época del descubrimiento de America)
Creo que no es aconsejable leer "Las venas abiertas de América Latina" y tomarlo al pie de la letra. Al menos no como documento histórico y mucho menos ponerlo en un altar como a la biblia del nuevo mundo. Es un libro bastante tendencioso y que a pesar de contar con numerosas cifras y datos no refleja la realidad. Lo he conversado con bastantes amigos, entre ellos sociólogos (un par son comunistas hechos y derechos, claramente la tendencia del libro)y una amiga profesora de La Sorbonne que a su vez lo ha conversado con sus amigos y cada vez lo encontramos un libro más peligroso. Se nota que Galenao no es un investigador real y, como todos sabemos, es fácil hacer que las cifras calcen para "crear" algo. Compruébalo con cualquier encuesta hecha por un gobierno en comparación a la de la oposición. Puede leerse, pero no creerse, o al menos debe leerse contrastándolo con otras fuentes... y eso que soy sudamericano
Es una vergüenza que recomienden alegremente un libro del vendepatria de Oppenheimer.
Publicar un comentario