sábado, 18 de agosto de 2012

Kate Fox: Watching the English

Idioma original: inglés
Título completo: Watching the English. The Hidden Rules of English Behaviour
Año de publicación: 2004
Valoración: muy recomendable

La hegemonía lingüística del inglés es un fenómeno indudable. Hasta tal punto es así que si hace unos años saber inglés podía ser un punto positivo en el curriculum, ahora es un requisito imprescindible para optar siquiera a la mayoría de los trabajos. Muchos llegamos a dominar la gramática a la perfección (no es difícil) e incluso a hacernos entender por hablantes nativos (desembarazarse del acento español ya es otra historia). Pero ¿qué pasa con entenderlos a ellos? Y no me refiero ya a la multiplicidad de acentos que nos podemos encontrar, no solo en el Reino Unido, sino repartidos por todo el mundo. Me refiero a ser capaces de desentrañar su discurso. El de los ingleses, más concretamente: esa gente que se precia de tener un sentido del humor propio.

Precisamente sentido del humor es lo que no le falta a este libro, escrito por la antropóloga social británica Kate Fox. En Watching the English (Observando a los ingleses, o algo así) vierte el fruto de sus investigaciones respecto a lo que ella llama "Englishness" (¿"inglesidad"?), aquellos rasgos que constituyen lo característicamente inglés --que no británico, puesto que esa sería una noción mucho más amplia, y una noción política más que cultural--. Ahonda en las normas tácitas que rigen el comportamiento de sus compatriotas y el suyo propio, haciendo un ejercicio de distanciamiento y observación crítica. Pretende llegar a definir la identidad nacional y el carácter de la gente, no para terminar con una apología patriótica, sino por curiosidad científica. Y, en mi opinión, lo consigue.

El libro abre con un capítulo dedicado al tiempo, que se inscribe en una primera parte de "Códigos conversacionales". (¿Qué hay más inglés que la charla sobre las continuas inclemencias del tiempo?). Fox alude a una necesidad de seguridad que se ve continuamente amenazada, y a una forma sencilla y segura de "romper el hielo" de la conversación. En sucesivos capítulos, habla del humor, de los códigos lingüísticos, de la charla en el pub, de las normas de la comida, de las normas del sexo... y también de las clases sociales.

Y, como anticipaba, en todo momento Kate Fox hace gala de un sentido del humor y de una agudeza envidiables. Quizá uno de los mejores capítulos sea el del humor, en el que explica que no es que los ingleses sean mejores que otras naciones, sino que le confieren un valor fundamental: no es un apartado de la vida, sino que permea todos los aspectos de la "inglesidad". Según ella, los ingleses no se toman demasiado en serio a sí mismos… o por lo menos eso espera, porque si no su libro va a ser un fracaso total.

Entiende que el humor es uno de los aspectos que más les cuesta pillar a los extranjeros, y hace hincapié en la ironía y en el "understatement", un subtipo de ironía que consiste en minimizar lo que se está diciendo:

Needless to say, the English understatement is another trait that many foreign visitors find utterly bewildering and infuriating (or, as we English would put it, 'a bit confusing').

Cree que precisamente porque el humor es omnipresente, subyacente a cada mínimo intercambio lingüístico, los comediantes ingleses se tienen que esforzar más por hacerles reír. Esto puede parecer una tontería así dicho, pero a mí me dejó pensando que seguramente tenga razón.

Watching the English es un libro bien articulado y sumamente divertido, clave para comprender los entresijos de una cultura a la vez tan cercana y alejada de la nuestra. Debería ser lectura imprescindible en la asignatura de inglés de todos los colegios, porque seguro que nos ahorraría muchos malentendidos. Pero no solo es una lectura ideal para los que quieran saber sobre los ingleses. De hecho, a mí me lo recomendó una amiga inglesa. Será que Kate Fox estaba en lo cierto.

3 comentarios:

izas dijo...

Jo, pues a mí me parece interesantísimo. Paula, maldita, me había prometido a mí misma no comprar libros hasta haber terminado con la estantería de "pendientes" y creo que voy a caer... ay.

Nur dijo...

A mí me pasa igual. Esta mañana comprando un libro para un regalo,y he acabado comprándome yo tres!
Este libro es especialmente interesante para los que estudiamos la cultura inglesa, así que será mi próxima adquisición. Gracias!

Tatiana Maiarovskaia dijo...

Hola, tengo una consulta, donde han conseguido este libro en español?? He buscado por todas partes y no esta... Existe?