sábado, 14 de diciembre de 2019

Benito Pérez Galdós: Torquemada en la hoguera


Idioma original: Español 
Año de publicación: 1889
Valoración: Se deja leer


Torquemada en la hoguera es una novelita de apenas 140 páginas que inicia una tetralogía. Su protagonista, don Francisco, ya apareció en otra obra de Benito Pérez Galdós, Fortunata y Jacinta. Este hombre es un prestamista que se ha enriquecido ejerciendo la usura. Intentará ganar el favor divino cuando su hijo Valentín enferme. Para ello llevará a cabo actos de caridad impropios de alguien conocido por su avaricia. 

La instrumentalización de la piedad es, junto a la hipocresía de acudir a Dios solamente cuando te conviene, el tema principal de Torquemada en la hoguera. De dicho proceder deriva el falso arco de redención que experimenta don Francisco. 

Pese a que esta ficción tiene una premisa muy interesante, su ejecución es harto deficiente. Varios son los apartados que Galdós no acaba de desarrollar acertadamente. 

  • Los hechos se presentan, por lo general, desde un ángulo excesivamente melodramático. Eso sí, debo reconocer que, puntualmente, Galdós abandona ese registro afectado para obsequiarnos con pasajes irónicos cargados de mala leche. 
  • Los personajes son bastante planos. Incluso don Francisco «el Peor». Lo cual es imperdonable, teniendo en cuenta que esta novela es un estudio de personaje que versa sobre él, y que la extensión de la misma hubiera permitido una caracterización con muchas más dimensiones. 
  • Se desperdicia a Bailón y a la tía Roma. Ambos tienen potencial, pero se les impide brillar al relegarlos al limitado rol que el argumento les repara. 
  • Algunos diálogos se antojan pomposos. Entiendo que persiguen un efecto concreto (dotar de un patetismo tragicómico a don Francisco), pero no acaban de funcionar. 
  • Hay demasiadas escenas reiterativas que, para colmo, se alargan más de la cuenta. Especialmente esas que retratan los gestos de “piedad” del protagonista, o aquellas en que se ve a su hijo postrado en la cama por culpa de la enfermedad que le corroe.
  • El final carece de impacto porque el lector ya lo ve venir. A fin de cuentas, el verdadero carácter de don Francisco no nos es ajeno en ningún momento. Algo que podría haberse evitado, a mi humilde entender, empezando la narración en el momento en que Valentín cae enfermo y ciñéndose a la primera persona. 

Pero no creáis que he sido incapaz de encontrarle ningún aspecto positivo a Torquemada en la hoguera.

  • La prosa de Galdós es preciosa. Especialmente sus metáforas. 
  • Suelta buenas reflexiones sobre la avaricia y la espiritualidad. 
  • Las nada veladas burlas que hace a los usureros y a la Santa Inquisición (criticada alegóricamente) son hilarantes. 

Por todo lo dicho, Torquemada en la hoguera es, a mi juicio, una novela prescindible dentro de la producción de su autor. Aunque ha sido alabada por no pocos entendidos en esto de la literatura (César M. Arconada, Luis Buñuel o Sergio Pitol, por ejemplo), de modo que dadle una oportunidad. Quizás vosotros le sabéis encontrar virtudes que se me escapan. 


También de Benito Pérez Galdós en ULAD: Aquí

9 comentarios:

Esther dijo...

Este próximo año me he propuesto leer parte de su obra. De lo leído hace mil años cuando lo obligaban en el colegio ni me acuerdo. Pero no sé por dónde empezar.

Pio Baraja dijo...

Galdós entero es prescindible

1984 dijo...

Este tema de la falsa piedad religiosa y de la hipocresía de la burguesía española Galdós lo abordó también en otras novelas como Misericordia o Nazarín. Galdós hoy puede resultar melodramático y afectado. Su estilo literario castizo ya fue criticado en su época ("don Benito el garbancero"). Su visión de las clases menesterosas a veces peca de paternalista. Oras veces, don Benito es un poco cursi (mal del siglo XIX). Algunas de sus obras de teatro, que tuvieron un éxito enorme incluso fuera de España, como Electra, hoy son hilarantes. En muchos aspectos, Galdós no trascendió su época. Pero en otros sí, y ahí están sus novelas mayores para demostrarlo, que además tienen un enorme interés histórico y sociológico al mostrar con precisión el desenvolvimiento de las clases medias en el Madrid finisecular. Galdós fue el notario y el testigo de la clase media española, a la que él pertenecía. Para mí, una de sus mejores novelas, y de las más innovadoras, es "El amigo Manso", acerca de un intelectual que duda de su condición hasta el punto de afirmar que no existe más que como ente de ficción. En esta magnífica novela Galdós se muestra como un modernista prematuro y genial. No es menos cierto que otras páginas del maestro están alcanforadas y hoy se leen, si se leen, por obligación. Es el destino de muchos clásicos.

beatrizrodriguezsoto dijo...

A mí Galdós me gusta mucho pero prefiero el relato que hace en algunos de sus Episodios nacionales que he leído al de sus novelas. En ésta de hoy hace uso constante de su habitual tono irónico que en algunos momentos, la muerte, las plegarias, las riñas, no es adecuado, para mi gusto. En los Episodios el trato es más frio, menos sensiblero, creo yo, porque tiene que sujetarse a un hecho o a un personaje histórico.
De acuerdo, Oriol, con los valores y las objeciones que le haces.
Un saludo

fortunata dijo...

Leed La de Bringas, por ejemplo
o Misericordia y por supuesto Fortunata y Jacinta. Es un grandísimo escritor

Unknown dijo...

Empieza por La Sombra, después EL Audaz, luego le hinchas el diente a Episodios Nacionales y termina con Fortunata y Jacinta. Y luego , si te convence el autor, toda su vastísima obra literaria. Para mí , después de Cervantes, Puerta de la Literatura, D. Benito María de los Dolores Pérez Galdós. Un abrazo

Juan Carlos dijo...

En la tertulia de amigos que tenemos pensamos leer para el próximo mes de enero "Torquemada en la cruz" una de las novelas de la tetralogía. Hay quienes opinan que es una de las novelas imprescindibles no sólo de Galdós sino de la literatura española en general. En fin ya veremos.
Un saludo

Oriol dijo...

Esther, de Galdós solamente he leído "Torquemada en la hoguera" y "La sombra" (la cual te recomiendan por aquí). Esta segunda novela puede ser un buen modo de empezar con el autor. No es nada redonda pero tiene su interés, un personaje bastante carismático y abunda en descripciones preciosas.

1984, menudo comentario te has marcado. Gracias. Me apunto "El amigo Manso" (¡pintaza!). También otros clásicos más conocidos del escritor que otros han tenido a bien de sugerir.

Beatriz, precisamente a mí los pasajes irónicos de "Torquemada..." me gustaban porque estaban cargados de mala leche y se alejaban del tono sensiblero y melodramático general. Veo que en el resto de apreciaciones sí que coincidimos al 100%.

Juan Carlos, por lo que he visto, "Torquemada en la cruz" es la continuación directa de la novela que hoy traigo a colación. Ojalá la cosa mejore.

Anónimo dijo...

Gracias por la reseña. Es un placer leer a don Benito. Independientemente de cual sea nuestra obra favorita, el manejo que hace de la lengua siempre es magistral. Saludos.