Año de publicación: 1953
Valoración: Muy recomendable
El tema de esta obra dista mucho de ser navideño, pero las vacaciones de Navidad son un buen momento para acercarse a la obra de uno de los mejores dramaturgos de las letras españolas. Generalmente olvidado, ya sea por su alejamiento formal de las convenciones teatrales, ya por sus opiniones políticas siempre molestas, Sastre es el creador de innumerables obras teatrales, además de cuentos, novelas, poesías y, sobre todo, ensayos, muchos de ellos teorizando sobre la propia dramaturgia.
Tal y como su título anuncia, la obra habla sobre una escuadra militar a la que el destino parece condenar a la muerte. El drama se sitúa en una hipótetica Tercera Guerra Mundial. Varios soldados han sido condenados, por diferentes delitos, a ocupar un puesto en una escuadra situada en la vanguardia del ejército “amigo”, en medio de tierra de nadie y a pocos kilómetros de las filas enemigas. La única forma de escapar honorablemente es cumplir con los tres meses de condena. Supuestamente, a partir de ese día el ejército “amigo” vendrá a recogerlos.
Sin embargo, muy pronto se comienza a mascar la tragedia que marca el destino de esta escuadra y de cada uno de sus integrantes. El carácter diverso de los personajes, unido al contexto de continuo peligro en el que viven, hace que surjan constantes conflictos entre ellos. Y los conflictos poco a poco escriben el final de cada soldado.
Drama profundamente antibélico, fue censurado a los pocos días de su estreno, allá por 1953. No obstante, el tema de esta obra de teatro abarca un terreno mucho más profundo que la pura crítica antimilitarista. Los personajes y su destino hablan del sentido trágico de la vida y del peso que los errores de un individuo tienen sobre su existencia. En definitiva, teatro que se cuestiona, al fin y al cabo, sobre las grandes preguntas que han inquietado desde siempre al ser humano.
3 comentarios:
Me alegra mucho que hayas traído una obra de Alfonso hasta aquí. No tiene este escritor obras fáciles de leer. Hay que tener en cuenta que su fin es la representación teatral dónde es, como bien dices, uno de los mejores dramaturgos de este país. Quizás si esté algo relegado y siempre lo ha estado, por sus declaraciones algo polémicas. Alfonso es un hombre que no se calla la boca, pero sigue en activo y bien activo a pesar de sus años, al menos hace poco le vi pasear,pensativo (vivimos en el mismo pueblo) posiblemente elaborando su próximo libro u obra de teatro, porque sigue trabajando. Además de todo lo que tu nos has escrito sobre él, os diré que tanto Alfonso como su difunta esposa Genoveva, donaron a la Biblioteca Provincial de Donostia (KOLDO MITXELENA) toda su biblioteca personal. Cualquier obra de ellos está de esta manera disponible para sus seguidores. Un saludo.
Hola Mentxu:
La verdad es que no sé por qué he tardado tanto en reseñar a Alfonso. Es uno de mis autores favoritos y todo lo que he leído de él me ha hecho disfrutar como un enano. Alguna otra reseña caerá pronto.
Como tú dices, es un trabajador incansable, con una obra inmensa. Yo estuve a punto de verle hace un par de años en una charla en el Museo de Bellas Artes de Bilbao. Pero se puso enfermo y al final no pudo acercarse. Así que me quedé con las ganas :-)
En mi opinión Sastre es un dramaturgo excepcional. Yo no soy demasiado aficionada al teatro y sin embargo con sus obras puestas en escena he disfrutado. Aquí, en el entorno del Bidasoa donde vivo y también vive Alfonso, hay un director de teatro J.Gil que ha conseguido con sus puestas en escena un tandem perfecto.
Es infatigable, y aunque su salud es delicada y tiene fama de algo huraño, sé que siempre está dispuesto a recibir y hablar de lo que es su vida. El teatro.
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