Año de publicación: 2022
Valoración: Está muy bien
Ya hemos hablado en más de una ocasión de los efectos o posibles efectos de la "cultura algorítmica" en el mundo actual, si bien lo hemos hecho siempre desde el lado de la ficción. Es el caso, por ejemplo, de la reseña de algunas de la últimas obras de Edmundo Paz Soldán. Esta vez la aproximación viene de un lado más teórico a través de este magnífico ensayo de la extremeña Remedios Zafra.
Todo lo que prolifera si ser visto inquieta. Con esta frase lapidaria da comienzo un texto que, como todo buen ensayo, trata más de plantear preguntas que de ofrecer respuestas. Preguntas que pueden resumirse prácticamente en dos (¿qué es trabajar? y ¿qué es vivir?) pero que implican reflexiones mucho más amplias sobre, por ejemplo, los peligros que la tecnología implica para la democracia, la mercantilización de los individuos, la relación tecnología / ideología, los roles, las "casillas preestablecidas", la permanente necesidad de más de todo, etc.
Preguntas y reflexiones que abarcan distintos ámbitos (laboral, académico, cultural...) pero que no obvian algo fundamental que puede ser olvidado en este tipo de análisis: que la tecnología es creada por humanos y no algo meramente abstracto y que la crítica de la autora no implica en absoluto desdeñar los avances científicos y tecnológicos, las posibilidades que estos ofrecen y la necesidad que de ellos podemos tener.
De lo que Remedios Zafra habla es, más bien, de una necesidad de replantearnos una serie de aspectos que conduzcan a aquello que en teoría nos decían hace años, que la tecnología debe ayudar y no controlar o limitar las vidas. Para ello habrá que tratar de cambiar inercias, de salir de esos bucles invisibles que nos llevan a un sentimiento de esclavitud y vértigo ante la "lógica aplastante" de los mercados y la eficiencia, ante la velocidad de los acontecimientos. De ahí el elogio del pensar / imaginar sobre el producir / consumir, de la lentitud sobre la urgencia, de la comprensión y la empatía sobre la polarización, del valor social del trabajo sobre las (i)lógicas del mercado, etc.
Todo ello tratado de una forma relativamente asequible para un lector medio (o medio-bajo, como yo), con referencias teóricas entre las que destaca "La condición obrera" de Simone Weil y situaciones de la vida cotidiana perfectamente reconocibles, pero sin reduccionismos absurdos ni maniqueísmos. Aquí no se trata de "criticar por criticar" sino de pararse a reflexionar y decidir qué camino tomar. Porque otra sociedad "menos mala" es posible. Es nuestras manos está.
No hay comentarios:
Publicar un comentario