Idioma: inglés
Título original: The whites
Año de publicación: 2016
Traducción: Óscar Palmer
Valoración: muy recomendable
Al lector ocasional de este blog puede que le parezca poco menos que una herejía que yo proclame que el género policial me suscita escepticismo. O que le escandalice que cosas como Agatha Christie (válidas como inicio a la lectura y blablabla) me parezcan apenas medio (va, uno) escalón por encima de la novela romántica o la del Oeste. Por repeticiones de esquemas y por escasa perdurabilidad. Puede leerse y devolverse al tipo de la tienda a ver qué recuperamos o por cuál nos la cambia que no hayamos leído ya. Pero su lugar en la estantería nunca va a ser el preferencial. Y si digo esto, y si aprovecho para sacar algunos conceptos que se quedaron fuera cuando escribí sobre ese bluff que me pareció La chica del tren es porque Los impunes es justo el negativo de esa literatura basada en el misterio y el susto y el ayayay, esa literatura del menosmalqueloheacabao en la que, lapidadme que me lo merezco, se ha convertido casi todo el género desde la invasión del thriller escandinavo, y solamente redimido por las incursiones en el terror psicológico o la prosa elegante de autores como Pierre Lemaitre y pocos más.
Así que me encanta que Los impunes no quede relegado al arrinconamiento de las series negras y se le considere como lo que es, literatura, con escenarios y personajes coincidentes con cierto género, pero literatura.
Las manos se elevan con las piedras cuando digo frases como esta última. Lo sé.
Y eso que con The wanderers me llevé una relativa decepción. Pero Price la escribió con 24 años. De eso ha pasado ya tiempo, y Price, aparte (qué pesados con mencionarla siempre) de ser guionista de The Wire y de alguna película, ha evolucionado, ha enriquecido su estilo y ha conocido en profundidad el mundo que describe. Los impunes recuerda (cuando se conoce su progresivo desarrollo) a cierta novela (no insistáis porque no diré cual) de Patricia Highsmith. Pero está adaptada a los tiempos que corren y carece de la ingenuidad que la ha castigado con el tiempo (a la de Highsmith). Es hora ya de reivindicar que el género se ha retroalimentado de mucho del contenido visual de series y películas, y que las figuras cinematográficas (inspectores de vidas grises y apáticas arrastrados por las desgracias que su trabajo les obliga a ver un día y otro) nos son familiares. Billy Graves es un personaje más entre ellos, pero dejad que os diga que es memorable, porque Price sabe hasta saltarse el estereotipo del héroe casual y lo define con todos sus claroscuros y sus contradicciones. Es un policía que vive con su mujer, Carmen, enfermera, sus dos hijos, y su padre, antiguo policía devastado por la demencia senil. Los impunes del título son criminales que Billy y otros compañeros del cuerpo consiguieron detener, pero que se zafaron de pagar sus culpas. Asesinos, en su mayoría, que se pasean tranquilamente gracias a un juicio favorable o a algún error de instrucción. Y al grupo de policías esa injusticia le corroe. A Billy, además, le están pasando cosas extrañas. Alguien está acosando a su familia y no sabe quién ni por qué.
Los impunes, lectura ágil, adictiva, pero comprometida con la coherencia y con fragmentos muy notables (puntualmente destella la minuciosidad descriptiva basada en los detalles de un Franzen) no merece ser confinada por su temática o su desarrollo. Price se ha preocupado de que el lector quede sumergido en ese submundo que es el cuerpo de policía de Nueva York y lo ha hecho evitando los recursos fáciles del susto, la sorpresa o el giro argumental. Una novela muy disfrutable.
Otras obras de Price en ULAD: The Wanderers, La vida fácil
Los impunes, lectura ágil, adictiva, pero comprometida con la coherencia y con fragmentos muy notables (puntualmente destella la minuciosidad descriptiva basada en los detalles de un Franzen) no merece ser confinada por su temática o su desarrollo. Price se ha preocupado de que el lector quede sumergido en ese submundo que es el cuerpo de policía de Nueva York y lo ha hecho evitando los recursos fáciles del susto, la sorpresa o el giro argumental. Una novela muy disfrutable.
Otras obras de Price en ULAD: The Wanderers, La vida fácil
La tengo en inglés y hable contigo sobre este libro en twitter. Tras leer tu reseña lo empezaré con mucho gusto. Gracias.
ResponderEliminarTe ha gustado el libro? No lo has dicho..
ResponderEliminarEn mi opinión bastante inferior a La vida fácil sin dejar de ser un libro muy recomendable. Pero ojalá se recuperasen más traducciones de novelas de Price. La novela negra está saturada de series interminables de detectives que afrontan casos poco reales y se debería recuperar a autores como Price, McBain o Wambaugh.
ResponderEliminarEjem: suelo poner "muy recomendable" a los libros que me gustan. A menos que alguien me explique como usar la ironía con solo dos palabras, eso es muy serio. Gracias por los comentarios.
ResponderEliminarHola Francesc,
ResponderEliminarSi tuvieras que optar entre "La vida fácil" y "Los impunes" para empezar a leer a Price, que me dirías?
Gracias
Pues no leí "La vida fácil", que reseñó, hace ya tiempo, un compañero. No puedo resolver tu duda, Gabriel
EliminarNo sé si sea bueno, pero ya logro saber, al leer un párrafo, si la reseña es tuya. Me encanta llegar al final del texto y acertar. Hasta ahora, cada libro que he decidido leer a partir de tus textos ha sido un gran acierto.
ResponderEliminarVaya! Sutil manera de advertirme de que tiendo a repetirme ¿alguien sabe de cursos baratitos de reseña creativa? Je. Bueno, misterioso/misteriosa, gracias por el comentario y, ejem, si dieras ejemplos de esos aciertos, me ayudarías bastante.
EliminarNo creo que sea repetirse, pero sí hay un estilo que se percibe. ¿Ejemplos? Claro... Departamento de especulaciones, Breve historia de siete asesinatos, Stoner (que lo terminé hoy) y Voces de Chernóbil... aunque ese último era una apuesta segura, pero tu reseña le dio fuerza.
ResponderEliminarFreya León
Te acabo de encontrar y me gustan tus reseñas. Son tentadoras. Este libro me lo leo seguro.
ResponderEliminarGracias, venía desconfiando de las recomendaciones de Fresan, pero a vos te creo.
ResponderEliminarSaludos
Gracias por los comentarios. Fresán? Creo que Fresán es un tipo que, por lo menos, indaga y busca y se preocupa de transmitir. Otra cosa es hacerle caso a pies juntillas el 100% de las veces. Pero mucho respeto por Fresán. Gracias por los comentarios.
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