Idioma original: francés
Título original: Le Voyage d'hiver
Fecha de publicación: 2011
Valoración:Se deja leer
La última reseña que publiqué en ULAD, hace algo más de una semana, versaba también sobre una obra de Amélie Nothomb. Y espero que a nadie le siente mal que en tan poco tiempo vuelva a la carga con otra desconcertante pieza de la irrepetible belga, pero en mi defensa diré que Viaje de invierno se trata de la ultimísima novela de la Nothomb (en España salió al mercado en marzo del año en curso), autora que como casi todos sabemos, publica una nueva novela cada año.
Pero en este caso, el librito anual de la escritora que tan bien acostumbrados nos tiene, no me ha entusiasmado especialmente. Y eso que la idea era buena (rarita, pero buena) y que sus personajes de nombres estrafalarios se las traían (a saber: Zoilo: escritor perdedor dispuesto a inmolarse por amor; Aliénor: escritora de éxito víctima de un extrañísimo caso de autismo; Astrolabio: la guardiana, cuidadora y empleada de Aliénor totalmente entregada a su protegida).
El libro, escrito en primera persona, empieza con una cruda confesión del tal Zoilo: va a secuestrar un avión que sale de París y va a estrellarlo. Y todo porque su amor por una fascinante mujer no consigue llevarlo a buen puerto. Tras esta bofetada argumental en la jeta, Zoilo nos va contando cómo conoció a la bella Astrolabio, el objeto de su obsesión, y la extrañísima relación que una a la joven con la escritora discapacitada a la que venera con devoción monjil.
No contaré nada más porque el libro es muy corto (basta con emplear una tarde entera para consumirlo) y es preferible que los que se animen a leerlo descubran sin pistas previas las extrañas situaciones en las que Amélie Nothomb coloca a sus personajes.
Viaje de invierno se lee bien, contiene las típicas reflexiones agudas y amargas que son ya marca de la casa, pero es corto, demasiado en mi opinión, y es una pena, porque dada la singularidad de los actores y la historia, Nothomb podía haber dedicado unos cuantos días más a su novela y habernos hablado más de sus personajes y de sus vidas y haberlos atrapado en muchas más situaciones desternillantes y cuasi surrealistas como a las que nos tiene acostumbrados. No sé: yo no termino de entender que Zoilo quiera morir por Astrolabio y tampoco me creo que su chapucero plan de secuestro/estrellamiento de avión le vaya a salir tan bien...
Lean y cuéntenme...
También de Amélie Nothomb en UnLibroAlDía: Metafísica de los tubos, Estupor y temblores , Biografía del hambre , Antichrista, Diario de Golondrina, Ácido sulfúrico, Ordeno y mando
Si me permiten, el comentario pedante de la semana. Astrolabio, nombre extraño donde los haya, era precisamente el nombre de la criatura fruto de uno de los más románticos amores medievales: los de Abelardo y Eloísa. Eso sí, era un varón. En pura lógica, una mujer debería llamarse más bien Brújula...
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