Fecha de publicación: 1929
Valoración: Está bien
Miasma es un libro "ideal para el verano" si creemos que esta etiqueta les corresponde a aquellas obras de prosa ágil que no tienen la intención de provocar en el lector reflexiones profundas, cuyos personajes están trazados sin demasiado detalle, y que contienen tramas más o menos divertidas. Literatura de entretenimiento, en fin, y si es posible, en formato poco aparatoso para que quepa bien en la maleta modelo Ryanair.
Su autora es la estadounidense Elisabeth Sanxay Holding, una mujer de buena familia que nació a finales del siglo XIX en Nueva York y que se casó a los veintipocos con un diplomático, lo que le llevó a vivir en exóticos lugares.
Sus primeras novelas las publicó a partir de los años 20, y la temática de estas obras tenían una temática más bien romántica, pero con la famosa Gran Depresion del 29, su editor le aconsejó meterse en el género noir, tan de moda entonces como ahora, y fue con libros sobre crímenes y misterios con los que Sanxay logró cierta fama a la vez que ayudaba a su marido a pagar las facturas.
Miasma es el primer libro que leo de esta mujer casi desconocida para mí (me sonaba vagamente gracias a que una de sus obras, La pared vacía, ha sido dos veces adaptada al cine), y la verdad es que me ha gustado sin llegar a entusiasmarme. Supongo que se trata de una novela negra de manual, aunque con cierto encanto hitchcockiano que las obras de este género actuales han perdido.
La novela narra lo que le sucede a un joven médico, el doctor Dennison, cuando, desesperado por la nefasta situación económica que está viviendo el mundo (la crisis del 29, sí), decide entrar a trabajar en la clínica privada del maduro y elegante doctor Leatherby, una suerte de Christopher Lee con bata blanca (o al menos, así me lo imagino yo). Dennison sólo quiere ahorrar y casarse con su prometida, la voluble Evie, pero sus sueños de ganar dinero con un trabajo predecible y honrado sufrirá un vuelco cuando descubra que su jefe tiene mucho que ocultar. Sólo diré que al poco de entrar a trabajar con Leatherby, uno de los pacientes del veterano médico muere de un infarto, y que Hilda, la bella enfermera, le sugerirá a Dennison que se marche de ahí cuanto antes.
Sugerente, ¿no?
En fin: una lectura amena e interesante para entretenerse y terminar un libro de suspense breve y muy bien escrito sin la sensación de haber perdido el tiempo.
Como curiosidad, decir que Sanxay es considerada una de las maestras de Patricia Highsmith y que Hitchcock la incluyó entre sus escritores de suspense favoritos.
¡Qué bien! Ideal para el verano como las bicicletas, las sandalias de meter el dedo gordo y las mujeres de tetas grandes y corazones estrechos. ¡Me encanta la literatura estacional! A mí, que soy hijo de clima oceánico...jijijijiji...
ResponderEliminarEstoy deseando que lleguen recomendaciones literarias más abrigadas.
PD: rabio por no poder cazar más gazapos, pero es lo que tiene no conocer la obra. Porque... ¡haberlos haylos!
Empecé leyendo Miasma y he acabado leyéndome todas las novelas de esta autora. Tarea difícil, puesto que solo hay traducidas tres, si no me falla la memoria: Miasma, La pared vacía y Nido de arañas. Pero las demás me las he leído en inglés. Holding es una autora elegante, que cultiva el suspense psicológico a la altura de Alfred Hitchcock. Se me cae la baba solo de imaginar lo que hubiera hecho Hitch con La pared vacía, que para mí es la mejor obra de Holding.
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