Idioma original: español
Año de publicación: 1989
Valoración: está bien
Reconozco que, cuando en 2005 le dieron a Sergio Pitol el Premio Cervantes (¿os acordabais de que en 2005 le dieron a Sergio Pitol el Premio Cervantes?), yo fui uno de esos que preguntaron: ¿y ese quién es? La verdad es que, incluso después de leer este Vals de Mefisto, todavía no tengo muy claro quién es, pero leyendo su biografía en Wikipedia, me entero de dos aspectos que pueden influir en su forma de escribir, por lo menos en este libro: el primero es que Sergio Pitol fue agregado cultural en ciudades como París, Varsovia, Moscú o Praga; el segundo es que Pitol es un consolidado traductor para varias editoriales españolas.
Porque, efectivamente, Vals de Mefisto es indudablemente un libro cosmopolita, incluso hasta la exageración: sus relatos se sitúan en Viena, en Venecia, en París, en Samarcanda, y las referencias culturales, tanto literarias como musicales (la música ocupa un lugar central en varios relatos) son eminentemente centroeuropeas. Incluso el lenguaje es sorprendentemente neutro, sin rastro de americanismos ni de coloquialismos, ni siquiera en los diálogos; nada que ver, por ejemplo, con un Juan Rulfo. Los personajes y los narradores parecen salidos de una novela de Henry James que Pitol estuviese traduciendo (Henry James es, de hecho, uno de los escritores que Pitol tradujo al español, y aparece mencionado como referencia en el propio texto).
Otro elemento que destaca en todos los relatos es su tendencia a la metanarración o a lo metaliterario: en el primero, "Mephisto-Waltzer", una mujer lee y comenta mentalmente un relato enviado por su marido; en el segundo, "El relato veneciano de Billie Upward", se nos resume el argumento de la novela Cercanía y fuga, sobre las aventuras venecianas de una tal Alice (Pitol también tradujo a Lewis Carroll, conviene notar); en el tercer relato, "Asimetría", el texto principal (las reflexiones de las hermanas Celeste y Lorenza) viene anotado por algunas acotaciones al margen que comentan la acción; el cuarto, "Nocturno de Bujara", el menos metaficcional de todos, tiene aires de relato fantástico con estirpe en las Mil y una noches (a lo mejor por eso es mi favorito de los cuatro).
Vals de Mefisto es obviamente la obra de un escritor muy culto y muy viajado; ni que decir tiene que esto en sí no es malo, pero a veces se transparenta demasiado en el texto: hay tantas referencias a Mozart, Rossini, Borges, Rossini, Monteverdi, Virginia Woolf..., que casi se puede abrir el libro al azar y encontrarse con una. El propio estilo, sin duda elegante y trabajado, resulta algo frío. Habrá gente a la que todo esto le parezcan virtudes (a Vila-Matas por ejemplo) a mí han llegado a cansarme un tanto; está claro que Pitol es un gran escritor, de eso no hay duda, y un gran constructor de relatos; pero a mí no ha terminado de atraparme.
También de Sergio Pitol en ULAD: El oscuro hermano gemelo y otros relatos
Pues es una pena que no tengas la capacidad de que te atrapen los libros y, te canse su referencias literarias y mas pena da, que no conozcas aunque sea de manera ligera a el escritor, y me causa gran sorpresa que suceda lo que describes: en relación a que su escritura no es como la de juan Rulfo. seguro piensas que en mexico vivimos como lo describe Rulfo en sus libros.
ResponderEliminardeberías ahorrate criticas tan banales y sin fundamento y llenas de ignorancia.
Chicos de Un libro al día: me gusta mucho su blog y lo visito con frecuencia, pero no puedo dejar de mencionar lo molesto que resulta que junto a su portal se abran tres páginas de publicidad a pesar del bloqueador de ventanas emergentes. No sé si ya les han mencionado este punto. Ojalá que puedan cambiar de contador si este es el que está dándoles problemas. Saludos.
ResponderEliminarHola, Javier, qué tal. Pues sí, algunas personas ya nos han comentado este asunto, pero no sé realmente a qué se debe. Puede ser alguno de los "banners" que tenemos a la derecha, o como tú dices el propio contador. Voy a hacer alguna prueba, a ver si lo arreglo...
ResponderEliminarAl primer anónimo, siento que mi reseña te haya ofendido, y sí, reconozco mi ignorancia en cuanto a Pitol; pero me reafirmo en mi impresión sobre el libro.
Señor... reseñador...pero ¿usted ha leído Nocturno de Bujara? ¿Usted ha leído y releído -porque es necesario para comprenderlo- esa maravilla que es Nocturno de Bujara? Parece que no. Una reseña pobre. Qué lástima.
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