Idioma original: español
Año de publicación: 1972
Valoración: Muy recomendable
El principio del placer es el volumen de relatos más conocido y reconocido de José Emilio Pacheco, un escritor que destaca fundamentalmente como poeta, pero que también ha sido capaz de crear una novelita maravillosa como Las batallas en el desierto. Por eso, precisamente porque existe Las batallas en el desierto, El principio del placer palidece en comparación. Es un buen volumen de relatos, un muy buen volumen de relatos, de hecho, pero no tiene la magia de aquella novelita-novelaza.
El libro está compuesto por seis relatos: los dos primeros se reconocen como surgidos de la misma pluma de Las batallas...; los otros cuatro algo menos. El relato que da título al volumen es, de hecho, el más parecido, porque está narrado desde el punto de vista de un adolescente que se enamora perdidamente de quien no debía: de una mujer de clase baja y mala fama rodeada de misterios y rumores. El cuento se convierte en un relato de desengaño, no solo sobre el amor, sino sobre la vida y la sociedad mexicana. "La zarpa" es un relato más simple, centrado en una relación de envidia que atraviesa toda la vida de dos amigas.
"La fiesta brava" es un relato que sirve de bisagra en el volumen. Usando la técnica de mis-en-abime, de relato dentro del relato, Pacheco nos presenta a un escritor frustrado al que le ofrecen la oportunidad tardía de publicar un cuento en una nueva revista de capital americano. El relato que escribe entonces, titulado también "La fiesta brava", es un remedo de "La noche boca arriba" de Cortázar, situado en un México a la Carlos Fuentes y con una evidente carga antiamericana. El relato es rechazado por la revista, y el escritor sufre las consecuencias. Los tres relatos que cierran el volumen ("Langerhaus", "Tenga para que se entretenga" y "Cuando salí de La Habana, válgame Dios") son relatos menos originales, que se introducen en el género del relato fantástico, el tema del doble, las incoherencias cronológicas o las desapariciones misteriosas.
El principio del placer nos sigue mostrando a un José Emilio Pacheco que domina las técnicas narrativas y que muestra, sobre todo en el primero de los relatos, una sensibilidad semejante a la demostrada en Las batallas en el desierto. Cuando abandona este registro y se sumerge en la corriente de la literatura fantástica latinoamericana, es más difícil verle destacar. Ahora, tengo curiosidad por leerle como poeta, para ver si reconozco al mismo escritor en expresiones distintas.
También de Jose Emilio Pacheco en ULAD: Los trabajos del mar, Las batallas en el desierto
Por mi parte,y al revés de este comentario, he leído más poesía de que narrativa de este autor. Sin embargo, intuyo que que es mucho mejor narrando que escribiendo versos. Desde mi modesta opinión adjunto un comentario sobre una antología publicada en la Región del Maule (Chile)de José Emilio Pacheco que acabo de leer:
ResponderEliminarhttp://christofernail.wordpress.com/2014/04/25/jose-emilio-pacheo-el-mensaje-humano-desde-mexico-d-f-a-la-region-del-maule/