Idioma original: inglés
Título original: The Children VI (sin publicar en inglés)
Traducción: Virginia Rech
Año de publicación: 2022
Valoración: muy recomendable
El día en que todos los mayores de 12 años cometen suicidio masivo por causas inexplicables, los niños sobrevivientes buscan la manera de rehacer su mundo. Así de simple.
Una trama así nos remite a películas apocalípticas como “The Happening”, de Shyamalan, o a novelas como “El señor de las moscas”. Y sí, algo de eso hay. Pero, a mi parecer, la trama en sí es lo de menos. Hay dos aspectos de esta novela (?) que la hacen merecedora de su valoración.
Primero, su estilo. Jesse Ball fragmenta su libro en numerosos capítulos de muy corta extensión (la mayoría de menos de una página). Más que ser testigos de una narración, cada capítulo se presenta como una imagen, una visión, en algunos casos solo como una intuición (diría que quedaría muy bien como novela gráfica, pero en algunos casos los elementos visuales son muy escasos). Las escenas se leen de un tirón, y la impresión se presenta casi simultáneamente. No sé si su antecedente de poeta le facilita presentarnos sus ideas concentradas de esta manera, pero incluso en la versión en español se percibe una economía de palabras que resulta concisa y evocadora. Esto, sin duda, refuerza el impacto emocional de la historia.
El segundo aspecto destacable es la profundidad psicológica de los personajes infantiles, más por sus interacciones que por sus diálogos. Los niños, en un inicio desconcertados, forman pequeñas comunidades y desarrollan sistemas, casi como un juego, que reflejan tanto su inocencia como su sorprendente madurez ante la adversidad. De tal manera se sugieren temas como la pérdida, el duelo y la reconstrucción del sentido de pertenencia y comunidad en un mundo donde las estructuras tradicionales han colapsado. Ball juega con la identidad y la percepción. Los niños, forzados a madurar de golpe, adoptan roles que antes les eran ajenos, convirtiéndose en líderes, guardianes o seguidores en un microcosmos desconocido.
Este es un texto más sugerente que revelador, lleno de alegorías y símbolos que requieren una interpretación personal. La trama, más o menos convencional al inicio del libro, pasa a un juego de máscaras en el que los personajes parecen desdibujarse y redefinirse constantemente. Esta metamorfosis constante refleja la inestabilidad del mundo en el que se encuentran, un mundo en el que las normas y las certezas han desaparecido.
Sin duda, una lectura estimulante.
Pude platicar con Jesse acerca de sus ideas sobre literatura, y en particular sobre "Los niños 6" y “Cómo provocar un incendio y por qué”, otra novela muy recomendable la cual reseñaré en próximas entradas. Les dejo el link abajo. No tiene desperdicio.
Escuché hablar de este libro en el podcast "El café de Mendel" y me picó muchísimo la curiosidad, ya que José Carlos Rodrigo lo alababa con bastante entusiasmo. Tras leer esta reseña (la entrevista tendrá que esperar) la verdad que pasa a ser una de las lecturas pendientes que terminará cayendo, seguramente en 2025.
ResponderEliminarHola Guille,
ResponderEliminarGracias por tu interés. Hasta hace poco no sabía de Jesse. Leí dos de sus libros que están traducidos al español y definitivamente recomiendo echarle un ojo. No te esperes al 2025, este libro te lo lees en una sentada, haha.