Idioma original: Español
Año de publicación: 1974
Valoración: Entre está bien y recomendable
Esta reseña comienza allá por el mes de abril, cuando Gonzalo (nieto del autor) me habló de la existencia de tres novelas publicadas por su abuelo y de la posibilidad de hacerme llegar alguna de ellas para una posible reseña. El caso es que me puse a buscar y, aunque en Madrid igual no te encuentras nunca con tu ex (según Ayuso, claro) pero puedes encontrar casi cualquier libro (esto lo digo yo), vi que en una librería de viejo estaba a la venta "El círculo Yesida" y allí que me fui.
El caso es que "El círculo Yesida", publicada en 1974 por Seix Barral (ojo que por aquella época publicó a Vargas Llosa, Cabrera Infante, Benet, Donoso o Manuel Puig), es una novela más que interesante, aunque algo lastrada por algún que otro vaivén y por una excesiva "densidad".
Pese a los nombres citados, el primer nombre que me viene a la cabeza tras la lectura de la novela es el de Ernesto Sabato. Porque habemus último representante de familia bien (no de rancio abolengo pero familia bien en todo caso), habemus casa enorme pero casi "infranqueable", habemus conspiración / persecución y habemus personaje central rarito / contemplativo / poseído por oscuras abstracciones que conviven con largos periodos de inercia.
Más allá de esto, la novela tiene en su fase inicial varias "subnovelas" en su interior ya que en ella conviven la novela existencialista, la novela más o menos histórica y la más o menos tradicional saga familiar latinoamericana. Pero mediado el texto, este se vuelve paulatinamente un denso, oscuro y por momentos críptico juego dialéctico-metafísico que hace que caiga en alguna reiteración, que el ritmo se resienta y que la lectura pierda "agilidad".
Dicho esto, la novela tiene varios aspectos a destacar, como son:
- el lado crónica del auge y decadencia de la estirpe de los Gentile (será casualidad la coincidencia del origen italiano del apellido de protagonista y autor?)
- el retrato de clases sociales de la época, con sus ricos en los que se mezcla la explotación más salvaje y cierta "empatía" para con el débil y sus servidores en los que conviven temor y dependencia
- el personaje de Graciano Gentile, con sus obsesiones y abstracciones, con su lucidez y su locura, su soledad y su culpa
- el juego oscuridad de la mente del personaje y oscuridad de la casa, dos caras de la misma moneda.
Así que no me arrepiento para nada de haber "arriesgado" con un autor y un texto del que creo que muy pocos han oído hablar y al que, en estos tiempos de recuperaciones y rescates, quizá habría que dar una relectura. Con sus "peros" incluidos, el texto merece la pena.
La leí hace más de 32 años...hermosa novela y hoy la recordé:y acá estoy haciendo memoria de ella.
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