Idioma original: griego
Título original: Ταξίδι με τον Έσπερο
Fecha de publicación: 1946
Valoración: Recomendable
Iré al grano: hoy traemos una novela romántica de manual.
Esta austera pero efectiva definición de Viaje con Venus estoy convencido de que espantará a algunos lectores de ULAD y a otros les hará buscar ansiosamente más información sobre la obra o, directamente, un ejemplar de la misma. Todo depende de si a uno le gusta o no darse, de vez en cuando, un atracón de primeros amores y decepciones, de dolor y de belleza: mucha belleza.
Viaje con Venus fue escrita por uno de los autores griegos más famosos de todos los tiempos, Ánguelos Terzakis, perteneciente a la Generación del 30 del país mediterráneo. Cuenta la historia de un muchacho huérfano, Glaukos, que va a pasar las vacaciones junto con su rígida tía Suzana a una hermosa casa de campo. Y el que parece un aburrido verano rodeado de personas insustanciales (entre ellas, un joven vecino tontorrón y su poco atractiva hermana, encantada con Glaukos), cambiará radicalmente de piel cuando el joven huérfano conozca a una extraña y adinerada familia de la zona cuya hija mayor, la bellísima Danái, le robará el corazón. Y además (detalle que luego se verá que es importante), durante toda la historia, Glaukos mantiene correspondencia con cierto amigo del colegio. Ambos intercambian extrañas cartas con profundas reflexiones impropias de chicos tan jóvenes.
La novela está bien escrita, se lee en un suspiro y uno puede poner cara a sus seres fácilmente, pero también es verdad que los personajes de Viaje con Venus son arquetipos perfectamente acabados y esmaltados en los que el lector reconocerá a mil y un clones de otras tantas obras románticas: Danái (su nombre remite a la Dánae de la mitología, la que encerrada por su padre en una torre fue seducida por un Zeus en forma de lluvia) es la típica musa de poetas gracias a sus cabellos sombríos, su piel de alabastro, sus formas suaves...; Glaukos, el héroe con mala suerte, es guapo y listo pero muy ingenuo y bueno como un pan bendito; la tía de Glaukos, Suzana, es seca e inclemente; el padre de Danái, un coronel retirado, es rancio y autoritario..., ¿sigo?
Lo dicho: tenemos aquí una novela romántica de manual con final sorpresa-sorpresa (y poco creíble, en mi humilde opinión) pero bonita y efectiva para tardes melancólicas como las de este otoño que ya expira...
Zzzzzzzzzz...
ResponderEliminarYo traduzco Iván-castellano / castellano-Iván, y lo que ha dicho, aproximadamente, es: "considero que el género romántico-sentimental es un género narrativo singularmente conservador y anquilosado en su tratamiento de los personajes, las tramas e incluso el lenguaje literario, por lo que no lo considero sustancialmente interesante como lectura potencial". Traducción libre.
ResponderEliminarPero es que leo "sus cabellos sombríos, su piel de alabastro, sus formas suaves..." y me ZZzzzzzzzzz...
ResponderEliminarYo también soy la leche localizando esta entrada al cabo de un año. Gracias por la reseña. La vincularé en mi blog, a ver si vendemos algunos ejemplares más.
ResponderEliminarEnhorabuena por tu trabajo, Seleucus, y gracias por pasarte por aquí.
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