Idioma original: español
Año de publicación: 1991
Valoración: Muy recomendable
Recuerdo que descubrí a Juarroz en la biblioteca de mi universidad, una de esas tardes en que me perdía entre un montón de libros de poesía, buscando entusiasmada autores nuevos, antologías de mis preferidos... y, probablemente, también irritando a los becarios encargados de sacar de su lugar y devolver a él todos los volúmenes que yo iba pidiendo.
Le confié a uno de los bibliotecarios mi deseo de encontrar nuevas voces poéticas y él me recomendó a un tal Roberto Juarroz, argentino, del que sorprendentemente nunca había oído hablar en la carrera.
Desde las primeras palabras que leí de este autor supe que el suyo era un idioma muy próximo al mío; o al menos, a aquel que más me interesa como lectora.
Me gustó su poesía, reflexiva y austera, casi seca. Me gustó su forma de ahondar en ideas y sentimientos sin precisar para ello de muchas palabras ni alardes estéticos.
Para muestra, un par de poemas de esta "Poesía vertical" que recoge muchos textos brillantes:
"Cuando se ha puesto una vez el pie del otro lado
y se puede sin embargo volver,
ya nunca más se pisará como antes
y poco a poco se irá pisando de este lado el otro lado.
Es el aprendizaje
que se convierte en lo aprendido,
el pleno aprendizaje
que después no se resigna
a que todo lo demás,
sobre todo el amor,
no haga lo mismo.
El otro lado es el mayor contagio.
Hasta los mismos ojos cambian de color
y adquieren el tono transparente de las fábulas."
"El silencio que queda entre dos palabras
no es el mismo silencio que envuelve una cabeza cuando cae,
ni tampoco el que estampa la presencia del árbol
cuando se apaga el incendio vespertino del viento.
Así como cada voz tiene un timbre y una altura,
cada silencio tiene un registro y una profundidad.
El silencio de un hombre es distinto del silencio de otro
y no es lo mismo callar un nombre que callar otro nombre.
Existe un alfabeto del silencio,
pero no nos han enseñado a deletrearlo.
Sin embargo, la lectura del silencio es la única durable,
tal vez más que el lector."
En mi opinión, la obra de Juarroz es una buena muestra de que el género poético, que algunos consideran minoritario y en decadencia, es algo más que un "sobreviviente" de pasados gloriosos.
La lectura de esta antología nos garantiza el encuentro con poesía contemporánea de una gran calidad.
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