domingo, 15 de enero de 2017

Siri Hustvedt: El hechizo de Lily Dahl


Idioma original: inglés
Título original: The Enchantment of Lily Dahl
Año de publicación: 1996
Traducción: Gian Castelli Gair
Valoración: recomendable para fans

Escritora de amplia riqueza cultural y multidisciplinar, con grandes intereses que abarcan no sólo la literatura sino también el arte y la psicología, Siri Husvedt mantiene a lo largo de su obra ciertos elementos ya característicos en ella. Así, tal y como ocurría en la anterior (y primera) novela de Siri Hustvedt "Los ojos vendados", las inquietudes principales de la autora siguen girando alrededor del comportamiento humano en lo tocante al deseo y al misterio existente en las relaciones entre personas, añadiendo pinceladas (y nunca mejor dicho) de tipo artístico.

En el libro que nos ocupa, la autora nos ubica en Webster (Minnesota), un pequeño pueblo en cuyo bar trabaja Lily Dahl, una joven camarera de carácter fuerte, luchador y atrevido. Sin mucha más distracción que el chismorreo y la habladuría, la vida sosegada, tranquila y monótona de los habitantes del pueblo se ve alterada por la llegada de Edward Shapiro, un artista de Nueva York que llega al pueblo para elaborar una obra pictórica algo particular. La obra consiste en la realización de retratos que contienen las historias personales de los modelos expuestos en los cuadros. Para poder pintar los lienzos, el autor necesita conversar durante horas con las personas a retratar para poder plasmar sobre la tela los sentimientos que se albergan en su interior y su auténtica personalidad. Asimismo, además del propio retrato, el autor pinta en el cuadro pequeñas viñetas con la historia de esa persona. De esta manera, diferentes habitantes del pueblo pasan ratos conversando con el pintor (conversaciones de las que se nos mantiene al margen) y empiezan a surgir una serie de rumores y misterios que copan el primer lugar en los chismorreos de sus habitantes.


Narrada desde el punto de vista de la joven Lily, la autora nos descubre como el carácter reservado de Ed despierta sus sentimientos y como se ve atraída no únicamente por su presencia sino por su carácter misterioso. Este hecho provoca un cambio en su personalidad  y actitud respecto a su propia vida de manera que empieza a cuestionarse su forma de afrontarla. Pero la aparición de Ed y sus retratos no únicamente afectan a Lily sino que, de igual manera, provocan la alteración de la vida cuotidiana del resto de los habitantes de forma que empiezan a sucederse un conjunto de situaciones extrañas donde se ven implicados de una manera u otra ya que el deseo, los celos y la personalidad extraña de alguno de los habituales clientes del bar se hacen presentes en la historia. Así, empezamos a descubrir las rarezas y detalles de ellos en una novela con cierto punto macabro, donde las escenas oníricas y visiones sufridas aportan misterio y oscuridad a la historia.


Al analizar esta novela en relación con el conjunto libros de la autora, los lectores que cuenten con Siri Hustvedt entre sus autoras favoritas sabrán que hay elementos de su literatura que son recurrentes a lo largo de su obra: el poder de los personajes femeninos, su visión sobre los hombres, anhelos e inseguridades. En línea continuista con su primera novela, la autora sigue indagando sobre el deseo y las relaciones personales añadiendo en este libro elementos de misterio algunos de los cuales aparecerán de nuevo con más profundidad en "Todo cuanto amé" aunque en otra forma, sustituyendo las pequeñas viñetas por maquetas de viviendas.


En cuanto a la valoración, desafortunadamente y muy a mi pesar, no puede ser más positiva ya que el libro avanza demasiado en el camino del misterio y se pierde entre tanto elemento onírico y surrealista, especialmente en su parte final. Únicamente en algunas ocasiones alcanza un nivel suficientemente alto para atraer la lectura de un lector que no sea un fan incondicional de la autora. Por contra, los seguidores de la obra de Hustvedt, y a pesar de que este libro no llega a la calidad del resto, sí encontrarán algunos elementos destacables que les permitirá constatar la evolución de la autora desde estos inicios algo titubeantes hasta la gran escritora que es en la actualidad.


También de Siri Hustvedt en ULAD: La mujer que mira a los hombres que miran a las mujeres, Recuerdos del futuroEl verano sin hombresLa mujer temblorosa o la historia de mis nerviosLos espejismos de la certeza, Madres, padres y demás

2 comentarios:

Marcela dijo...

Hola Marc. Interesante y muy amena tu forma de describir la reseña.. No podemos negar que Siri tiene su estilo muy peculiar de terminar sus libros.
Muchos Saludos !

Marc Peig dijo...

Hola Marcela. Agradezco tus palabras y la valoración que haces de la reseña.
Tal como dices, es innegable que Siri tiene una forma muy particular de escribir y siempre uno encuentra en sus obras una carga emocional que queda dentro de uno una vez terminado el libro. Esté más acertada o menos en sus libros, siempre hay algo en ellos que hacen que valga la pena leerlos. Gracias por leer nuestro blog y colaborar en enriquecerlo con tus comentarios.