tag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post5200720722974772804..comments2024-03-27T20:03:06.449+01:00Comments on Un libro al día: Gustavo Adolfo Bécquer: LeyendasSantihttp://www.blogger.com/profile/03340701547489427642noreply@blogger.comBlogger9125tag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-80753310756158552452020-06-01T17:33:17.487+02:002020-06-01T17:33:17.487+02:00Intuyo que Bécquer despierta recuerdos de viejas l...Intuyo que Bécquer despierta recuerdos de viejas lecturas, quizá de la adolescencia, y por lo visto es una sensación bastante placentera. Si es así, me alegro haber contribuido un poco a ello, Mayor.<br /><br />Gracias por visitarnos, un saludo.Carlos Andiahttps://www.blogger.com/profile/09534613995520813515noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-80329725657852099082020-06-01T13:13:53.922+02:002020-06-01T13:13:53.922+02:00Gracias carlos.... Me ha emocionado el recuerdo de...Gracias carlos.... Me ha emocionado el recuerdo del gran poeta... Mayor Thompson Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-39400612328531095002020-05-30T20:04:40.987+02:002020-05-30T20:04:40.987+02:00Hola de nuevo. Veo que tu memoria está muy impregn...Hola de nuevo. Veo que tu memoria está muy impregnada de los misterios becquerianos (y no solo). Efectivamente, la magia de lo inexplicable se encuentra en cualquier rincón de la naturaleza, en las fuentes, los bosques, los muros de los castillos o las naves de las iglesias.<br /><br />Y a propósito de tu comentario sobre esas brumas y espíritus tan gallegos, me llama la atención que entre las variadas localizaciones de las leyendas no haya ninguna de aquellas tierras, al menos ninguna que se pueda identificar. Por el contrario, hay varias historias (de aire medieval) situadas en Catalunya, unas cuantas en Toledo (Bécquer parece fascinado por sus callejuelas, palacios e iglesias) y un par de ellas en Soria, una de las cuales en ese monte de las Ánimas que cantaba Gabinete Caligari, dicho sea de paso. Será seguramente porque no conocía Galicia, porque si no le hubiera dado material para un segundo volumen de leyendas, por lo menos.<br /><br />Un placer, Beatriz.Carlos Andiahttps://www.blogger.com/profile/09534613995520813515noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-41313411297312135322020-05-30T18:03:21.985+02:002020-05-30T18:03:21.985+02:00Carlos Andia, por si acaso vuelves a esta página.
...Carlos Andia, por si acaso vuelves a esta página.<br />Estuve siguiendo con mis reflexiones sobre el sentimiento de la naturaleza en Becquer. Él percibe el "eter" (palabra que usa) lleno de las llamadas de los "súcubos" que incitan a las niñas a perderse, de risas de "ninfas" que enamoran a los jóvenes y que les atraen a las corrientes de agua en que ellas viven hasta que se ahogan en ellas. Sensaciones imprecisas, brillos de la luz, verdor de un alga que se mueve un instante entre la corriente, todo son sugerencias a su imaginación. Todo intangible, inmaterial e inasible. Si no lo fuera no sería mágico. Y, por la noche las ánimas , a veces acompañadas de lobos. <br />Wenceslao Fdez. Florez también penetró en un bosque animado, que eriza el vello si estás sólo porque sientes que no estás solo,hay presencias, alguien te ve. Pero Fdez. Florez no es de este movimiento romántico y ya te explica que los ojos de miles de seres diminutos están pendientes de tí. Y que los árboles cantan. Y aunque hace concesiones a lo sobrenatural, la Santa Compaña, Gudelia, todo es más racional.<br />¿Y qué pasa con Rosalía de Castro, también romántica, como Becquer, y con un gran sentido musical? Para ella, el espacio tampoco está vacío sino lleno: de adioses, de ayes, de sonidos: de gorjeos de los paxariños, los que están más cerca y los que apenas se perciben, de tañidos de campanas, las que están más próximas y las que se oyen lejos, muy lejos...De la armonía de las gotas de lluvia sobre el millo. De las gaitas de las romerías. De la lluvia miudiña. De los "airiños" que pasan medrosos sobre las calaveras del camposanto. Y de las "sombras", que no se ven a la luz del sol pero no nos dejan nunca.<br />beatrizrodriguezsotohttps://www.blogger.com/profile/04368564629235656609noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-15447354632148944702020-05-29T07:56:31.935+02:002020-05-29T07:56:31.935+02:00Beatriz, me ha encantado tu entusiasmo. Enlazando ...Beatriz, me ha encantado tu entusiasmo. Enlazando con el final de la reseña, tú eres el ejemplo de lector actual que sí es capaz de apreciar estos libros que parecen pasados de moda. Y no solo me da mucha envidia, sino que me mueve a reflexionar otra vez sobre el texto.<br /><br />Toloveo, muy interesantes tus apreciaciones sobre esos dos aspectos de la obra de Bécquer.<br /><br />Muchas gracias por vuestra participación. Saludos!Carlos Andiahttps://www.blogger.com/profile/09534613995520813515noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-13312152907275037282020-05-28T23:58:03.394+02:002020-05-28T23:58:03.394+02:00Además de suscribir lo dicho, me permito dos apunt...Además de suscribir lo dicho, me permito dos apuntes:<br />1.- Esa modernidad de Bécquer muestra en las leyendas otro ingrediente esencial: el carácter de esbozo, de bosquejo, de trazo a vuelapluma de su escritura. Tiene que ver en ello que publicaba en las hojas volanderas de los periódicos, donde se fogueó como escritor ágil y directo. También tiene que ver su temperamento, que le hizo preferir siempre esbozar a acabar. Con frecuencia exhibe en el narrador sus supuestas carencias y limitaciones, sus renuncias, sus dudas. Como si lo que estuviésemos leyendo no fuese el texto definitivo, sino un borrador. El antimazacote. El antitocho. En este sentido fue a contracorriente, pero anticipó la escritura moderna, como la anticipaba Baudelaire por aquellos mismos años en Francia. El resultado es una escritura de aparente facilidad, trazada con ligereza, pero de una personalidad muy definida, inexplicable, inasible.<br />2.- Sobre la moda de lo hindú (o pseudohindú, más bien), abundaron durante varios lustros las muestras en las revistas literarias hispánicas, e incluso en formato más solemnes. Véase Morsamor, de Juan Valera. Fue una de las muchas variantes del exotismo que adoptaron los incipientes modernos. Pero lo de menos era el escenario concreto(el Índico para los franceses, los antiguos imperios prehispánicos para Rubén Darío, la India en estos ejemplos...) Lo esencial era la lejanía, palanca fundamental para la evocación.Toloveonoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-42510013545280467312020-05-28T21:17:42.915+02:002020-05-28T21:17:42.915+02:00Tenías que ser tú, Carlos Andia. Sabía que un día ...Tenías que ser tú, Carlos Andia. Sabía que un día me darías una alegría.<br />Yo ahora soy una anciana. Soy gallega aunque solo he vivido en Galicia en los períodos de vacaciones escolares. Mi aldea, una belleza llena de montes y árboles. Cuando yo era niña, todos los caminos, todos los bosques, fuentes,recodos,todos los ríos y riachuelos tenían su leyenda de ánimas y aparecidos. Era además muy amiga de una vecina anciana, buena y sabia, que según la gente de allí echaba mal de ojo a las vacas. Cada vez que la visitaba me dejaba llena de miedos, curiosidades, historias increibles. De adolescente empecé a leer a Becquer que me fascinó; yo tenía ya ese gusto por lo mágico y sobrenatural pero su forma de escribir me pareció, además. inigualable, preciosa.Lo releí<br />muchas veces aunque en los últimos años con menos frecuencia. Hoy, con tu reseña, me llené de alegría por volver a leerlo. Y me sigue pareciendo maravilloso. El rayo de luna, preciosa; Maese Perez, insuperable.A mí me gusta mucho El miserere, El monte de las ánimas, que es un prodigio de acción..En El beso hay unos párrafos que son expléndidos: la carnosidad de la estatua que admira el militar francés borracho ;ve, con el resplandor de una hoguera, el rubor de la estatua y como se "mueven" sus labios. Y la "pasión" del guerrero que era su marido que le pega un guantazo de piedra. Todos los personajes son muy apasionados y vehementes.<br />Y hay en todo Becquer un sentimiento de desazón o turbación que le produce la naturaleza que a mí también me lo produce (en el libro de hoy me parece que solo lo percibo en los Ojos verdes) Entrar solo en un bosque, con los ojos muy abiertos y dispuesto a sentir y quedarse allí un buen rato puede ser una gran experiencia.<br />Gracias por la reseña.<br />Saludos. <br /><br /><br /><br />beatrizrodriguezsotohttps://www.blogger.com/profile/04368564629235656609noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-11098171665502268592020-05-28T14:48:19.927+02:002020-05-28T14:48:19.927+02:00Gracias por el complemento 👏👏Gracias por el complemento 👏👏Antonietahttps://www.blogger.com/profile/02307269653766296553noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8570074772940267554.post-96411075151017862020-05-28T13:27:44.000+02:002020-05-28T13:27:44.000+02:00Muy interesante y equilibrada la valoración que ha...Muy interesante y equilibrada la valoración que haces de las "Leyendas" becquerianas. La verdad es que Bécquer fue devorado por lo "becqueriano", un romanticismo tardío, cursi y bastante conservador. Un romanticismo, o postromanticismo, para señoritas provincianas, aprendices de poeta o tradicionalistas encandilados por toda la imaginería medievalizante de catedrales, abadías abandonadas, honrados y eternos campesinos que se confunden con la tierra nutricia, caballeros y damiselas, el escalofrío de lo sobrenatural o paisajes escenográficos con espectaculares amaneceres y crepúsculos. Con Bécquer se hizo mucha bisutería pseudoromántica; es cierto; y le quedó colgada la etiqueta: el pesado de las golondrinas. Pero creo que el Bécquer de las "Leyendas", las "Cartas desde mi celda" y las "Rimas" es bastante distinto a la imagen tópica que se tiene de este escritor. Por no alargarme, yo destacaría algunas cosas: en poesia, es el padre de la lírica española moderna. En España y fuera de España. Juan Ramón Jiménez, los Machado, Unamuno, Rubén Darío, Amado Nervo, Herrera y Reissig, José Asunción Silva etc. Todos los modernistas y simbolistas empezaron becquerianos. La influencia de Bécquer se rastrea hasta Cernuda ("donde habite el olvido") o el Neruda joven. Las poesías buenas de Bécquer son una maravilla. Hay que leerlas sin prejuicios y admitiendo que el sentimentalismo era el mal de su época. Pero es que su prosa es tan importante como su lírica (para mí, hasta mejor). Bécquer escribía con sencillez y claridad, sin los arrebatos castelarinos o zorrillescos hoy hilarantes; en este sentido, era moderno, por mucho que le volvieran loco las naves en penumbra de los templos, los sonidos apagados, los sepulcros etc etc. Además, cultivó con verdadero talento el relato breve de tema fantástico, inspirándose en el folklore español, la mitología romántica germánica y el orientalismo de moda. En España no son demasiados los cultivadores buenos del cuento y mucho menos de tema fantástico; Bécquer, sí. Otro detalle a tener en cuenta. De él parte una tradición de literatura fantástica en español que será cultivada en Latinoamérica (Borges, Cortázar, Bioy, Monterroso etc) y no tanto en la península (aquí seguíamos con el chorizo, la lana y el cardo borriquero), excepto en Cataluña y Galicia. Y, por último, Bécquer anuncia a los autores del 98 (y posteriores) por su sincero interés por la España rural (en su época, la inmensa mayoría de los españoles vivían en pueblos). Bécquer es uno de los inventores del paisaje español moderno, sobre todo en sus magníficas "Cartas desde mi celda." Allí dice que él es moderno, que como hijo de su siglo cree en el progreso, pero que también le preocupa la conservación del acervo tradicional español antes de que la modernización lo elimine por completo. Nada menos. Y lo dice en 1861 o 1862 (!!!), cuando España era "tradicional" en un 90%. Una inteligencia así es difícil de encontrar en la literatura española. Así que Bécquer, conservador a su manera, fue realmente uno de los precursores de la modernidad literaria en España e Hispanoamérica. Ni cursi, ni facilón, ni reaccionario. Sus defectos son más de su tiempo que de él. 1984noreply@blogger.com